Como decíamos ayer, el presidente argentino Javier Milei se convirtió en la estrella del Foro de Davos, con su discurso liberal, es decir, como defensor del papel de la libertad individual de cada persona -y no del Estado- en la actividad económica. 

Durante su discurso en el Foro de Davos dejó algunas perlas como estas, que recogemos a continuación, y que a buen seguro hicieron revolverse en su asiento a los socialdemócratas allí presentes: 

"Los socialistas se vieron forzados a cambiar su agenda. Dejaron atrás la lucha de clases basada en el sistema económico para reemplazarla por otros supuestos conflictos sociales igual de nocivos para la vida en comunidad y para el crecimiento económico. La primera de estas nuevas batallas fue la pelea ridícula y antinatural entre el hombre y la mujer. El libertarismo ya establece la igualdad entre los sexos. La piedra fundacional de nuestro credo dice que todos los hombre somos creados iguales. Que todos tenemos los mismos derechos inalienables, otorgados por el Creador, entre los que se encuentra la vida, la libertad y la propiedad. En lo único que devino esta agenda del feminismo radical es en mayor intervención del Estado para entorpecer el proceso económico, darle trabajo a burócratas que no aportaron nada a la sociedad, sea en formato de ministerios de la mujer, organismos internacionales dedicados a promover esta agenda. Otro de los conflictos que los socialistas plantean es el del hombre contra la naturaleza: sostiene que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser protegido a toda costa, incluso llegando a abogar por mecanismos de control poblacional o la agenda sangrienta del aborto". 

¿Qué pensaría Pedro Sánchez, adalid de exactamente los valores contrarios a los que defendió el presidente argentino, al escuchar a Milei? 

Por cierto, lamentablemente no son sólo los socialistas los que abogan por la sangrienta agenda del aborto. Y si no que se lo pregunten a Núñez Feijóo (PP)...