La Unión Europea, y 'YayoYou' -como se conoce en las redes a Joe Biden, el somnoliento abuelete progre que dirige Occidente- se ha puesto firme, firmísima, con Rusia tras la invasión de Ucrania y 'Yayoyou' ha pronunciado una sentencia severísima sobre Putin: Si matas a tu hermano te quedas sin merendar, Vladimir.
Mientras, la realidad va por el enfrentamiento entre las tropas de Rusia y las tropas de Europa. Esto es: las tropas rusas se encuentran a las puertas de Kiev y Pedro Sánchez amenaza a Putin con actuar según los principios de legalidad, paz y seguridad. Al tiempo, la Unión Europea Europa y Estados Unidos preparan severísimas sanciones económicas para hundir al Kremlin: ¡Feroz firmeza!
¿Sanciones económicas frente a misiles y cazabombarderos? Entonces, ¿para qué poseer el ejército más poderoso del mundo?
La última es que EEUU, el jefe de Occidente, no enviará tropas a Ucrania... salvo que Putin ataque un país de la OTAN. ¿A que ni entonces lo hace? Estamos permitiendo que Putin invada Ucrania, mañana invadirá Polonia, Alemania, Francia o España y, estrategia del salami en rodajas, Occidente seguirá sin reaccionar. Paso a paso, rodaja a rodaja. Menos mal que era tonto este Putin. 'Yayoyou' se confiesa pío católico pero lo cierto es que no cree en nada porque no está dispuesto a sacrificar nada por sus creencias.
Insisto: Putin cree en algo mientras Europa no cree en nada. Y Occidente debe estar dispuesto a empuñar las armas, al tiempo que debe tratar de impedir la guerra: "si vis pacem para bellum"
¿Sanciones económicas frente a misiles y cazabombardeos? Entonces, ¿para qué poseer el ejército más poderoso del mundo? Putin ha descubierto que este Occidente aburguesado se ha vuelto cobarde y se aprovecha de ello. No reaccionará aunque las tropas rusas se planten en la Torre Eiffel.
Nos hace falta un nuevo 'Milagro del Vístula', unos polacos valientes que estén dispuestos a parar a un Ejército rojo que les supera en número de efectivos, en armamento, en todo... salvo en coherencia con la ley natural.
Insisto: Occidente no ha sabido ganarse a Putin porque Occidente se ha vuelto progre. Y claro, ahora que Putin que cree en algo mientras Europa no cree en nada, ataca con las armas, entonces, hay que defenderse con las armas. Sí, hay que ir a la guerra, aunque la guerra sea algo horrible. Hay que buscar la paz pero enseñando al enemigo que estamos dispuestos a defendernos.
Para que Europa vuelva a ser Europa, los europeos deben estar dispuestos a arriesgar su vida por sus principios, que son principios cristianos. Al menos, a arriesgar su comodidad
Sí, Occidente debe estar dispuesto a empuñar las armas, al tiempo que debe tratar de impedir la guerra: "si vis pacem para bellum". Si cuando Putin situó 100.000 soldados en la frontera de Ucrania, Europa y Estados Unidos hubieran colocado otros 100.000 en el este de Ucrania, Putin no hubiera lanzado su ataque.
Para que Europa vuelva a ser Europa, motor del mundo y faro de la civilización, los europeos deben estar dispuestos a arriesgar su vida por sus principios, que son principios cristianos. Al menos, deben estar dispuestos a arriesgar su comodidad.
No hemos aprendido nada del pacifismo de Chamberlain y del necesario giro belicista de Churchill. También Chamberlain quería la paz, pero transigió con los planes expansionistas de Hitler y llegó la II Guerra Mundial.
Tampoco hemos aprendido nada de la sanguinaria II República española, con los comunistas disfrazados de demócratas -como ahora mismo en el Gobierno Sánchez- y del necesario golpe militar de Franco. La guerra civil española tuvo un significado ideológico y filosófico mucho más profundo que la II Guerra mundial. Porque en un mundo sin principios o -aún peor- de inversión de valores, donde el mal se defiende como si fuera el bien y el bien se trasforma en mal... no puede haber otro final que la colisión... y tratemos de que no sea violenta.
No hemos aprendido nada del pacifismo de Chamberlain y del necesario giro belicista de Churchill. Tampoco de la sanguinaria II República española y del necesario golpe militar de Franco
En cualquier caso, Putin, un tipo con fe pero sin caridad, ha demostrado ser mejor conocedor de la naturaleza humana que cualquier líder europeo o que el vengativo senil 'Yayoyou'. Putin ha puesto a prueba a Occidente y se ha dado cuenta de que puede hacer con él lo que le venga en gana: su pasividad, por mor de su cobardía, está asegurada.
En ello está, mientras Occidente adopta una actitud que va, desde la cursilería de Pedro Sánchez, asegurando que será muy solidario con los ucranianos (que lo sea enfrentándose al ejercito ruso) o con la bochornosa actitud del presunto hombre más poderoso del mundo, 'Yayoyou': Vladimir, como mates a tu hermano te quedas sin merendar, ¡Ea!