Lo cuenta FridayFax, y el tema viene de lejos. En enero contamos en Hispanidad que la Unión Europea está presionando a la Organización Mundial de la Salud para que establezca “relaciones oficiales” con el bufete mundial de abogados sobre aborto Centro de Derechos Reproductivos.
La OMS tiene el poder de otorgar la designación de “relaciones oficiales” a un grupos de actores no estatales, como instituciones sin fines de lucro y corporaciones privadas. Una vez se llega al acuerdo, éste es renovable cada tres años. El acuerdo contempla el alcance de la relación, aunque este estatus tienen un papel oficial en el flujo de trabajo de la agencia de salud. No se les proporciona simplemente acceso a las instalaciones de la ONU y la oportunidad de hacer declaraciones como otras organizaciones. Ayudan en la producción de informes, publicaciones y documentos de orientación.
En este acuerdo concreto, la solicitud de relaciones oficiales del Centro de Derechos Reproductivos incluye una propuesta para ayudar en la redacción y difusión de las normas y directrices de la OMS sobre salud y derechos sexuales y reproductivos, es decir, sobre aborto.
Ahora, miembros del Congreso de EE.UU. han tomado cartas en el asunto y han enviado una misiva a la OMS donde amenazan al organismo con recortar su financiación si llegan a estables esas realaciones oficiales con el controvertido bufete de abogados: "Como miembros del Congreso, consideraremos la decisión de otorgar un estatus especial al Centro de Derechos Reproductivos como prueba de que la OMS no se puede reformar y como un argumento más para retener toda financiación a la organización", afirma la carta de advertencia encabezada por el congresista republicana Andy Biggs (R-AZ), señalando numerosos proyectos de ley para deshacer la financiación estadounidense a la OMS pendientes en el Congreso.
En la carta el Congreso destaca la creciente desconfianza de los estadounidenses hacia la OMS. La organización de adoptar relaciones oficiales con el bufete se ha retrasado hasta junio porque Estados Unidos no es el primer país que se ha mostrado contrario al acuerdo porque señalan que el objetivo principal del bufete es despenalizar el aborto en todo el mundo, pisoteando los derechos soberanos de los países a elaborar sus propias leyes sobre el aborto según lo acordado en el derecho internacional.
La carta de los congresistas lamenta el engaño y la manipulación del bufete al intentar crear el derecho internacional al aborto: “Hay numerosos ejemplos de CRR en connivencia con personal y agencias de la ONU para presionar a los países a través de mecanismos de la ONU, así como de tribunales nacionales e internacionales. Esto es parte del plan bien documentado de la CRR para imponer el aborto en todos los países, socavando la soberanía y eludiendo todos los procesos democráticos”.
El bufete también afirma que el acceso al “aborto seguro” es necesario para disminuir las muertes maternas. Los informes que concluyen que el aborto legal es necesario para reducir la mortalidad materna tergiversan enormemente la ciencia y los datos: “No podemos seguir permitiendo que las organizaciones internacionales anulen la soberanía estadounidense para promover políticas sociales atroces”.
En Hispanidad hemos alertado cómo la Organización Mundial de la Salud (OMS) -el organismo de Naciones Unidas para la salud- se ha convertido en el mayor promotor del aborto a nivel internacional. No podemos olvidar las pautas de la OMS emitidas en marzo que piden a los países que eliminen todas las restricciones legales y políticas sobre el aborto, es decir, establecer el aborto hasta el mismísimo momento del parto. Campaña en la que recordemos, España está inmersa completamente.