Informa Friday Fax y la cosa se las trae. Todo empieza como es habitual en la ONU con un informe: nuevo documento de políticas del Fondo de Población de las Naciones Unidas, que sugiere que la gestación subrogada, incluida la subrogación comercial, debe considerarse parte de la “planificación familiar integral” y, potencialmente, como un derecho humano. ¡Toma ya!
El documento ofrece una nueva definición de “planificación familiar integral” como “un enfoque holístico para la planificación y formación familiar. Abarca servicios de planificación familiar, una variedad de métodos anticonceptivos, tratamientos de fertilidad, adopción, acogida y maternidad subrogada”. Es decir, primero nos hemos cargado la familia y las tradiciones y valores de la vieja Europa, ahora los reconstruimos y nos centramos en mercantilizar a la mujer e implantar la idea de que ser padres es un derecho, ojo, como todo buen derecho, sólo si quieres, si no, tienes el aborto libre, faltaría más.
A lo que hay que añadir que el UNFPA ha sido una de las agencias de la ONU más agresivas en la promoción del aborto en todo el mundo.
Por no hablar de las contradicciones de la ONU, porque la Convención sobre los Derechos del Niño establece que el niño tiene, “en la medida de lo posible, derecho a conocer a sus padres y a ser cuidados por ellos”.
El informe señala la subrogación, junto con la adopción y el acogimiento, como una forma de que los servicios puedan “adaptarse a diferentes sexos, géneros... orientaciones y expresiones sexuales”, entre otras categorías. También dice que "el apoyo financiero para tratamientos de fertilidad, maternidad subrogada, adopción y congelación de óvulos puede ampliar las opciones de las mujeres y ayudarlas a prosperar en el lugar de trabajo".
Y atención porque el informe habla de la “justicia reproductiva”, cuyos tres valores fundamentales incluyen “el derecho a tener un hijo, el derecho a no tener un hijo y el derecho a criar a un niño o niños en entornos seguros y saludables”.
Habrá que recordarlo una vez más, el aborto lleva vigente en España 38 años y ya hablamos del infanticidio como un derecho y queremos que sea libre, es decir, hasta el mismo momento del parto, y parece que vamos por el mismo camino con los vientres de alquiler que, al igual que la fecundación in vitro, se anuncian como dar vida, cuando lo que ofrecen es muerte. Es más, esta técnica es a la que se recurre en muchas ocasiones para poder gestar en el vientre de alquiler.
Esta práctica constituye otro "avance progresista" que, como tantas otras iniciativas de vanguardia, supone un atentado contra la ley natural, es decir, una violación de la naturaleza. En resumen: tener hijos no es un derecho, es un don; gestarlos y criarlos... y educarlos y quererlos es un deber.