En Brasil, el exjuez Sergio Moro, símbolo de la megaoperación anticorrupción Lava Jato que llevó a prisión a Luiz Inácio Lula da Silva, se afilió ayer miércoles a un partido centrista con miras a participar en las elecciones de 2022. Moro, de 49 años, no definió a qué cargo postulará, pero la cúpula del partido Podemos lo señaló como el “futuro presidente de Brasil”, recoge El País de Uruguay.

El exjuez se posicionó así en lo que ya se conoce en Brasil como la “tercera vía”, una eventual alternativa a Jair Bolsonaro y a Lula, que aún no anunció su candidatura pero es favorito en las encuestas.

“Si fuera necesario asumir el liderazgo en este proyecto, mi nombre siempre estará a disposición del pueblo brasileño”, dijo Moro en una ceremonia en Brasilia. “No huiré de esa lucha, aunque sepa que será difícil”, añadió.

Las encuestas indican que el actual presidente brasileño Jair Bolsonaro obtendría en las presidenciales de octubre de 2022 el 26% de los sufragios frente al 44% para Lula. El exjuez no alcanza el 10%.

Moro destapó con Lava Jato una red de sobornos a políticos para obtener contratos en la estatal Petrobras. Y desde su corte en Curitiba, condenó en 2017 a Lula, quien permaneció 19 meses en prisión y no pudo postularse en las elecciones que ganó Bolsonaro.

El exjuez fue ministro de Justicia de Bolsonaro, cargo que dejó en abril de 2020 tras acusar al mandatario de intentar interferir en la Policía.