Henry Parot y García Gaztelu, dos de los pistoleros etarras más sangrientos, serán acercados al prisiones ubicadas en Vascongadas, todo ello producto del consabido acuerdo entre Sánchez y el PNV. Y les acompañarán otros 11 presos etarras.
Además, una vez en Euskadi serán ya cuidados por los nacionalistas que controlan el Gobierno Urkullu.
Txapote está acusado de los asesinatos de Miguel Angel Blanco, Fernando Buesa, Fernando Múgica y Gregorio Ordóñez, con su acercamiento ya sólo quedan 30 etarras lejos del País vasco.
Henry Parot es un etarra con menor historia de asesinatos que Txapote que dio nombre a la doctrina Parot. No nos perdamos en ello, simplemente decir que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) -¡qué casualidad!- Humanos de Estrasburgo decidiera rebajar las penas a los etarras, A lo mejor deberíamos marcharnos del Consejo Europeo y, con ello, del puñetero TEDH, que siempre falla contra España.
España tiene dos tipos de enemigos: los habituales y los amigos de Pedro Sánchez
Y hablando de organismos internacionales, casi todos ellos en la galaxia de esa hidra llamada Derecho Internacional: hoy también se conocía que el Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, ha apoyado la petición de los presos del Procés, en concreto de Junqueras, Romeva Rull y Turrull (no, Ortega y Gasset era uno, pero Rull y Turrull son dos, Josep y Jordi) se les privaron de sus derechos políticos al obligarles a dimitir de sus cargos antes de ser condenados por sedición.
Naturalmente no se trata de un tribunal, sino de otra cabeza del estúpido mundialismo progre que manda en Naciones Unidas. No es que haya dicho que han sido condenados injustamente. No, lo que ha dicho es que no deberían haber deajdo sus cargos antes de la condena. Pero, naturalmente, la traducción fue inmediata, por ejemplo, por parte del presidente de la Generalitat, el honorable Aragonés, para quien está claro que ellos tenían razón.
Está claro que España tiene dos tipos de enemigos: los habituales y los amigos de Pedro Sánchez.