Nadie duda de que tener empleo es un principio fundamental, tanto para la integración social como para el desarrollo completo de las personas.“El trabajo, más que un fin en sí mismo, es un medio para conseguir diferentes aspectos como son: una imagen más positiva y útil de cada uno, la estructuración del tiempo, la pertenencia al grupo, el aumento en la cantidad y calidad de interacciones sociales y la independencia económica”, dice en su web Down21.org para añadir que todas estas afirmaciones no son ajenas al colectivo de personas con discapacidad intelectual, para quienes el trabajo es también una prioridad. 

Según el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), hay en nuestro país 3,8 millones de personas que padecen algún tipo de discapacidad. Las cifras revelan que en los últimos años se han producido avances importantes en el empleo para este colectivo, ya que en 2017 se firmaron un total 110.068 contratos, el mejor registro de la historia. Una cifra superior a los 98.802 de 2016, y que prácticamente duplica los 61.008 de 2012. Pero todavía queda mucho por hacer como dicen las asociaciones y entidades vinculadas directamente con este colectivo.

A través del Club de Voluntariado, la Fundación Sacyr desarrolla una serie de actividades como las campañas de Voluntariado Corporativo, realizada mediante la plataforma Ingenium

Precisamente en esa tarea se vuelca la Fundación Sacyr que recientemente ha firmado un convenio de colaboración con la Fundación Juan XXII Roncalli para ampliar y adecuar las cocinas del Centro Especial de Empleo Roncalli ubicadas en Vicálvaro (Madrid) y desde donde realiza el servicio de catering.

“La mejora en las cocinas permitirá incrementar la actividad del catering de la Fundación y con ello crear nuevos puestos de trabajo que favorezcan la inclusión laboral de las personas con discapacidad intelectual. Actualmente el catering cuenta con 45 empleados, el 67% tiene algún tipo de discapacidad”, explican fuentes de la Fundación Roncalli.

Sacyr también se encuentra colaborando en el Proyecto IDEA, organizado por esta misma Fundación” una ambiciosa iniciativa que tiene como objetivo encontrar, de la mano de empresas, organizaciones y entidades de primer nivel, tres ideas de negocio que permitan la generación de empleo de futuro para personas con discapacidad intelectual”.

Estos proyectos se enmarcan dentro de los fines de la Fundación Sacyr que persigue la “cooperación para el desarrollo de grupos humanos desfavorecidos, la promoción de la acción social y la atención de personas con riesgo de exclusión social. Asimismo, está alineado con las directrices que marcan el Plan de Responsabilidad Social Corporativa de Sacyr que promueve los valores y principios éticos del Grupo”, señalan en Sacyr.

Estos proyectos se enmarcan dentro de los fines de la Fundación Sacyr que persigue la cooperación para el desarrollo de grupos humanos desfavorecidos

El catering del Centro Especial de Empleo de Fundación Juan XXIII Roncalli ofrece servicio en tres áreas: colectividades, servicios de catering y eventos.

50 años trabajando por la integración

Fundación Juan XXIII Roncalli es una entidad sin ánimo de lucro con más de 50 años de historia. Tiene como objetivo principal la integración sociolaboral de personas con discapacidad, sobre todo intelectual, “sin perjuicio de atender igualmente a colectivos con otras discapacidades o personas en riesgo de exclusión social”, matizan desde la Fundación. Entre sus servicios cuenta con un Centro de Día, un Centro Ocupacional, un Centro de Formación para el Empleo y un Centro Especial de Empleo (CEE). El CEE fue inaugurado en 1988 y actualmente cuenta con unos 350 trabajadores y más de 30.000m2 de instalaciones para prestar servicios al mundo empresarial. “La propuesta de valor se basa en la eficiencia y calidad del servicio y solo en último término se destaca el apoyo en el cumplimiento de la Ley General de Discapacidad (antigua LISMI) que las empresas obtienen contratando sus productos o soluciones”, señalan desde la organización. 

Maximizar los resultados de la acción social

El Consejo de Administración de Sacyr tomaba en diciembre de 2007 la decisión de constituir una Fundación corporativa, que permitiera al Grupo maximizar los resultados de su acción social “en beneficio de sus destinatarios, y contribuir de manera más eficaz al bienestar y al desarrollo del entorno en que lleva a cabo sus actividades”, recoge en su web la empresa multinacional de infraestructuras y servicios. 

Entre las iniciativas y patrocinios que la Fundación ha desarrollado en 2018, destacan la 8ª Edición de Premios Sacyr a la Innovación 

Entre los proyectos y patrocinios que la Fundación ha desarrollado en 2018, destacan la 8ª Edición de Premios Sacyr a la Innovación que se enmarca dentro de uno de sus fines como es el de fomentar la investigación científica. “Asimismo, está alineado con el objetivo de reforzar las políticas de I+D+i, dentro del Plan de RSC, que se concreta en el Plan Empresa Global 2002”. La tecnológica, TyrisSoftware, resultó ganadora de esta  edición.

La Fundación Sacyr colabora además, y entre otras iniciativas, con la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid en proyectos y actuaciones cuyo fin es la integración y promoción laboral y profesional de la población inmigrante y autóctona, tanto en el ámbito del trabajo por cuenta ajena, como en el impulso del espíritu emprendedor.

También, y a través del Club de Voluntariado, la Fundación desarrolla una serie de actividades como las campañas de Voluntariado Corporativo, realizada a través de la plataforma Ingenium, dirigidas a los empleados del Grupo Sacyr en todos los países donde está presente la compañía.