En 2016, Naciones Unidas declaró el 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en Ciencia, con el objetivo de derribar los obstáculos que impiden la plena participación de las mujeres en el ámbito científico y tecnológico, sectores que marcan cada vez más el futuro social, laboral y económico. Por ello y también teniendo en cuenta el tema de la igualdad, han cobrado relevancia carreras vinculadas al ámbito de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (conocido como STEM, por sus siglas en inglés), pero aún faltan mujeres que opten por estas, y acabar con los estereotipos y fomentar los referentes son algunas de las claves para solucionarlo.

De todos los estudiantes matriculados en carreras del ámbito STEM, sólo el 35% son mujeres, según el informe ‘Descifrar las claves: la educación de las mujeres y las niñas en materia STEM’ publicado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), y únicamente el 3% realiza estudios relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación (conocidas como TIC). Tan sólo un 28% de los estudiantes que se gradúan en ingeniería y un 33,3% de profesionales dedicados a la investigación son mujeres, como recoge el ‘Informe de la Unesco sobre la Ciencia: hacia 2030’. Unos datos bastante preocupantes teniendo en cuenta que las carreras STEM son el motor de la innovación.

Tan sólo un 28% de los estudiantes que se gradúan en ingeniería y un 33,3% de profesionales dedicados a la investigación son mujeres. Datos bastante preocupantes teniendo en cuenta que las carreras STEM son el motor de la innovación

 

Los empleos ligados al ámbito de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas son cada vez más solicitados, pero las empresas tienen dificultades para cubrilos. De hecho, la Comisión Europea cifra en más de 300.000 los puestos que quedaron vacantes en 2020 para profesionales de datos y en 168.000 en el caso de los de ciberseguridad, según datos del Observatorio Nacional Tecnología y Sociedad. Además, sólo una quinta parte de los puestos TIC están ocupados por mujeres.

En 2017, España tenía una proporción de graduados en educación superior de 21,9 por mil, superior a la de otros países europeos, como Alemania (20,4), Francia (18,5) e Italia (14,5), o a la media de la UE. Las comunidades autónomas de Asturias, País Vasco, Cantabria, Cataluña y Aragón ocupaban los primeros puestos en nuestro país en matriculados en carreras STEM. Asimismo, el 2,6 por mil de los jóvenes españoles de entre 25 y 34 años había completado estudios de doctorado, cifra similar a la alemana y superior a la media comunitaria. Pero la comparación ya no era tan positiva al observar el sexo: entre los estudiantes matriculados en las carreras STEM sólo el 13,1% eran mujeres, frente a un 30,4% de hombres. Además, el porcentaje de mujeres en las carreras TIC apenas llegaba al 13%, según el estudio ‘El estado de la Ciencia 2020’ elaborado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI).

La Comisión Europea cifra en más de 300.000 los puestos que quedaron vacantes en 2020 para profesionales de datos y en 168.000 en el caso de los de ciberseguridad. Además, sólo una quinta parte de los puestos TIC están ocupados por mujeres

 

Las empresas tecnológicas líderes en nuestro país, representadas por la patronal DigitalES, han advertido de una tendencia decreciente en el número de alumnos que se matriculan en una ingeniería o en una carrera técnica. Esta tendencia es aún más acusada entre las mujeres, lo que acaba penalizando la diversidad en los equipos y afectando negativamente al conjunto de las organizaciones. Por ejemplo, en el caso de los estudiantes matriculados en ingenierías, se ha vislumbrado un ligero repunte en el curso 2020/2021, respecto a los anteriores, según datos del Ministerio de Universidades, aunque resulta muy insuficiente para cubrir la demanda de especialistas técnicos en las empresas, principalmente en las tecnológicas.

Aunque entre el 54% y el 64% de jóvenes consideran que todas las profesiones son adecuadas tanto para hombres como para mujeres, continúan existiendo importantes estereotipos: por ejemplo, un 26% de las mujeres y un 30,8% de los hombres cree que los sectores asistenciales y de cuidados son más adecuados para ellas, así como el ámbito de la educación (22,2% y 27%, respectivamente). Entre las atribuciones vinculadas a los hombres, destacan las profesiones de informática (35%), las ingenierías (28,9% y 33,8%), la gestión empresarial (21% y 28%) y la ciencia e innovación (20,8% y 24,4%). Así lo recoge el ‘Barómetro Juventud y Género. Identidades y representaciones en una realidad social compleja’, una investigación realizada por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la FAD (antes Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, ahora Fundación FAD Juventud) que analiza la percepción de adolescentes y jóvenes entre 15 y 29 años sobre la desigualdad entre hombres y mujeres.

Aunque entre el 54% y el 64% de jóvenes consideran que todas las profesiones son adecuadas tanto para hombres como para mujeres, continúan existiendo importantes estereotipos: casi un tercio ve más adecuados los sectores asistenciales y la educación para ellas, y las profesiones de informática e ingenierías para ellos

 

En este contexto se hace necesario trabajar el cuestionamiento de estos estereotipos desde una perspectiva inclusiva, con el fin de aprovechar todo el potencial que tienen los jóvenes, independientemente de su sexo. Un estudio de DigitalES señala que las mujeres prefieres carreras con una mayor orientación social precisamente por los estereotipos existentes y las expectativas sociales. No sólo esta el tema de los estereotipos, también la falta de autoconfianza o la influencia familiar son otras razones de peso para que las mujeres no decidan estudiar carreras técnicas. Además, la falta de mujeres referentes en el ámbito STEM contribuye al distanciamiento entre sus carreras y las niñas y jóvenes, que terminan evitando las carreras científicas y técnicas, porque no las conocen bien ni tampoco todas sus posibilidades, por lo que no se convertirán en referentes para las niñas del mañana, creándose un círculo vicioso que debe empezar a romperse cuanto antes.

Precisamente, con el objetivo de que se vaya rompiendo, Seat S.A. lanzó el 11 de febrero una iniciativa para acercar a mujeres STEM de la compañía a niñas y niños de entre 8 y 17 años de distintas escuelas con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Así, por ejemplo, en la clase de 5ºB de la American School of Barcelona recibieron la visita de Sara Riera, que estudió Matemáticas e Ingeniería Industrial y actualmente es la responsable de Energy & Charging Services de Seat S.A., para que les mostrara “la experiencia de una mujer en la ciencia”. Riera les contó cómo descubrió que quería estudiar carreras STEM: “Tenía vuestra edad, nos tocaba hora de matemáticas y mi mejor amiga me miró y me dijo muy seria ‘Odio las mates’, y yo pensé ¿Odiarlas? ¡A mí me encantan!”. “Entonces me di cuenta de que a la mayoría tampoco le gustaban, y eso me hizo sentir especial; vi que tenía la oportunidad de trabajar en algo que me apasiona y contribuir a la sociedad”. A partir de esta conversación casual, Riera decidió enfocar su carrera a las matemáticas y a la ingeniería, lo que la condujo a su trabajo actual aportando soluciones de movilidad sostenible desde Seat S.A.

Sara Riera, que estudió Matemáticas e Ingeniería Industrial, hoy es la responsable de Energy & Charging Services de Seat S.A. y habló sobre las carreras STEM: “Si os gustan, es lo mejor que podéis hacer [...], así que trabajad duro, perseguid vuestros sueños y seréis grandes referentes para las niñas del futuro y para todo el mundo

 

Una de las niñas preguntó a Riera: “¿Qué es lo mejor de tu trabajo?”. Y la respuesta fue muy clara: “Que me dedico a hacer un mundo mejor”. Otra niña le cuestiona: “¿Por qué deberíamos estudiar carreras STEM?”. Y para Riera la verdadera cuestión es “¿y por qué no? Si os gustan, es lo mejor que podéis hacer, porque con vosotras traéis diversidad al talento: tú, o tú, o tú, podríais ser las diseñadoras o las ingenieras de uno de los coches eléctricos del futuro”. “Las mujeres no tenemos muchas referentes en STEM, así que trabajad duro, perseguid vuestros sueños y seréis grandes referentes para las niñas del futuro y para todo el mundo, también para mí”, las animó Riera. “Queremos que tanto las niñas como los niños se inspiren en mujeres ingenieras, matemáticas, científicas, y que puedan decir quiero ser como ella”, ha subrayado Benjamin Ramírez, responsable del departamento de Culture, Change & Diversity de Seat S.A.

Otra iniciativa interesante dentro de la industria del automóvil es Renault Graduates, un completo programa de formación, con prácticas en la empresa, que busca captar el talento de jóvenes que hayan estudiado un grado o un máster de una titulación en Castilla y León, y ofrecerles desarrollar sus competencias en el entorno profesional. Está destinado a 20 recién titulados o que estén en los últimos cursos, que sean jóvenes dinámicos, creativos y con ganas de crecimiento, que una vez superada la fase de selección, entrarán a formar parte de un programa con una formación de más de 150 horas en procesos de fabricación e ingeniería, así como competencias técnicas y de comportamiento, que luego complementarán con prácticas en la empresa contando con un plan de desarrollo individual. Esto supone una muestra más del fuerte compromiso que ha tenido siempre el grupo automovilístico francés con la formación de las nuevas generaciones.

Gabriel Novela, director gerente de la Fundación Talgo, subrayó que “para incrementar el interés y la matriculación de las carreras STEM es necesario invertir en una formación escolar de calidad incorporando a la misma referentes femeninos que les sirvan como ejemplo”

 

Otro ejemplo es el convenio de colaboración que firmaron Fundación Talgo y la Asociación Creática (asociación sin ánimo de lucro que se dedica a la mejora de vida y oportunidades de niños y jóvenes en situación de vulnerabilidad a través del desarrollo de sus capacidades creativas). Un convenio que se firmó el pasado 23 de junio, con motivo del Día Internacional de la Mujer en la Ingeniería, e incluye la promoción de acciones encaminadas a fomentar el talento y las vocaciones científico-tecnológicas en chicas jóvenes de entre 11 y 14 años, así como trabajar para reducir la brecha digital de género. Gabriel Novela, director gerente de la Fundación Talgo, destacó que el proyecto “contribuirá a que cada vez más jóvenes quieran ser ingenieras y que estas pasen a formar parte activa en la innovación como principal causa de la cuarta revolución industrial”, además, subrayó que “para incrementar el interés y la matriculación de las carreras STEM es necesario invertir en una formación escolar de calidad incorporando a la misma referentes femeninos que les sirvan como ejemplo”.

Entre las iniciativas para fomentar el estudio de carreras STEM entre niñas y jóvenes, Endesa anunció su compromiso de inspirar a 1.500 niñas este año a través de los programas ‘Ella, te cuenta’ y ‘Back to school’, y lleva promoviendo otras muchas desde 2017. En ‘Ella, te cuenta’ tienen la colaboración de Fundación Universidad-Empresa (FUE) y a través de webinars dirigidos a alumnas de la ESO, las profesionales con perfiles técnicos de Endesa compartirán sus experiencias y su visión sobre la ciencia y la tecnología. Asimismo, la energética promueve las STEM dentro del sistema educativo gracias al trabajo de Fundación Endesa y al proyecto ‘RetoTech’, que en el presente curso escolar cumple su séptima edición, con la colaboración de varias consejerías de Educación autonómicas y BQ Educación: es una apuesta por la innovación educativa y el emprendimiento tecnológico, retando a docentes y alumnos a desarrollar iniciativas tecnológicas que resuelvan necesidades reales de su entorno.

El proyecto ‘Impacto STEM’ busca impulsar las vocaciones hacia carreras STEM entre las adolescentes cambiando la percepción generalizada de que las mujeres estén menos motivadas para cursarlas y de que socialmente estén menos reconocidas que los hombres para ejercerlas

 

Más recientemente, a principios de mes, Fundación Endesa y Fundación FAD Juventud se han unido para lanzar el proyecto ‘Impacto STEM’, cuyo objetivo es impulsar las vocaciones hacia estas carreras técnicas entre las adolescentes de 3º y 4º de la ESO. Con el diseño de la formación y un primer pilotaje, se pretende cambiar la percepción generalizada de que las mujeres estén menos motivadas para cursar estudios STEM y de que socialmente estén menos reconocidas que los hombres para ejercerlas con éxito. Un proyecto que también busca visibilizar la importancia de las STEM en la mejora de nuestra vida cotidiana, fomentar el desarrollo de conocimientos técnicos y científicos en las chicas y eliminar las barreras que lo dificultan.

Por último, conviene destacar que la Fundación Cotec señala que “disponer de graduados en áreas STEM y en programas de doctorado parece una de las vías más adecuadas para la formación de líderes en procesos de innovación, porque se trata “de las personas con una mayor probabilidad de dedicarse, entre otras labores, a actividades de investigación y desarrollo”. Por su parte, David J. Santos, director de la Escuela Politécnica de la Universidad CEU San Pablo, ha destacado que “la investigación es consustancial al entorno de las STEM”, pues “no se conciben estas disciplinas si no están asociadas a procesos de investigación, desarrollo e innovación. Caeríamos en la obsolescencia, enseñaríamos disciplinas muertas, desconectadas de la realidad social a la que deben servir”. Además, Santos considera que, “aunque nuestra situación con respecto al entorno europeo ha mejorado significativamente en las últimas décadas, seguimos contando con áreas en las que los avances no terminan de despegar; es el caso de la transferencia de resultados a la industria”. Está en manos de todos cambiarlo y que cada vez haya más mujeres científicas, técnicas, ingenieras y matemáticas.