Carlos Herrera (COPE), a Pablo Iglesias: “A Abascal tú no le puedes hablar de escraches porque desde pequeño se ha jugado el físico como tú no te lo has jugado nunca”

En la COPE, Carlos Herrera decía: “El que se inventó los escraches es el camorrista de Pablo Iglesias. Ayer empezó, con el matonismo que le caracteriza, a amenazar a Ayuso, a Abascal, a algún periodista. Es una vergüenza que un vicepresidente del Gobierno se pronuncie con ese tono de mafioso señalando con el dedo a rivales políticos. Hay quien quiere ver en ello una amenaza. Fueran cuales fueran las intenciones de Iglesias, son deplorables. Y además las palabras de Iglesias son falsas. Él fue el que inventó los escraches y se los empezó a hacer a Rosa Díez en la universidad. Y después a todo el mundo con la coña de que eran jarabe democrático. Y ahora se lo están haciendo a él. Y no es presentable que se lo hagan a él, es absolutamente inaceptable que la gente vaya al chalet de Pablo Iglesias, empiece a pegar bocinazos”. “No se puede, no se debe. Pero claro, jocker, tú que eres tan listo. Tú no has caído en cuenta que a Abascal, por ejemplo, tú no le puedes hablar de escraches porque desde pequeño se ha jugado el físico como tú no te lo has jugado nunca. Abascal se tiró toda la infancia y su juventud aguantando él y su familia amenazas y ataques de los rivales políticos, que no eran unos paseantes con cacerolas. Eran asesinos terroristas que mataron a más de 800 personas, los mismos que tú elogiabas y alababas cuando ibas de visita a las herrikotabernas”. “Tú no tienes que advertir a nadie de a tu derecha sobre los escraches porque los han sufrido porque tú eras quien los inspiraba, los jaleaba y los justificaba”. “Tú trajiste ese virus a la política, tú llamaste a eso jarabe democrático, son tu criatura, tu obra política y han llegado hasta la puerta de tu casa, cosa que no se merece tu familia”. “El que ha contaminado hasta ese punto la vida política de España eres tú”.

En Onda Cero, Rubén Amón lanzaba sus preguntas: “Una vez que Carmen Calvo ha descubierto el misterioso eje que comunica Pekín, Teherán, Madrid y Nueva York, ¿sospecháis que el Gobierno está afrontando la crisis del coronavirus con la ouija?

Permitidme en este mismo contexto experimental un ejercicio para vosotros y para la audiencia. ¿Ya tenéis un boli? ¿Os dais cuenta de que si pintáis y seis y un cuatro sale la cara de tu retrato?

Volvemos a nuestra sintonía, pero seguimos con las manualidades, en este caso con el taller de pintura imaginativa de Tezanos. ¿No es escandaloso que la encuesta del CIS reconozca la subida de Ciudadanos justo cuando ha apoyado al PSOE?

¿Y no es peculiar que el PSOE, o sea, siga subiendo, y que la distancia con el PP se haya abierto hasta los 11 puntos?

¿Ha entrado el estado de alarma en estado de alarma? Veremos en qué condiciones y en qué plazos Sánchez lo saca adelante hoy en el Parlamento. Y juega en dos mesas, como un crupier. En una pacta 15 días con Cs. En la otra apura un mes con ERC.

¿Puede sobreponerse la política española a la marcha de Marcos de Quintos?

Iglesias avisa de que los próximos en sufrir un escrache pueden ser Ayuso o Abascal. ¿Avisa o más bien incita y moviliza? Recuerde usted, señor Iglesias, que es vicepresidente del Gobierno. Y no un activista”.

En Onda Cero, Carlos Alsina destacaba: “e dijo ayer Iglesias, por cierto, a Ferreras que esto de los escraches en las casas de los ministros le parece mal porque se sabe cómo empieza y no cómo termina.

Los escraches ahora son crispación. Pues tiene razón Iglesias. Se sabe cómo empieza pero no dónde acaba. Empieza con el escrache a Soraya Sáenz de Santamaría, o a Cifuentes, y acaba con el escrache a Pablo Iglesias. Ya le pasó a Ada Colau, escrachadora mayor del reino. Que tuvo que soportar insultos en la plaza de Sant Jaume siendo ya alcaldesa y le pareció fatal. Y eso que no era en su casa, sino en el ayuntamiento.

Dejen en paz a la gente en su casa. A los políticos, a sus familias, a sus hijos, a sus vecinos.

El escrache no se define por cómo son quienes lo ejecutan o qué motivos alegan –-esto que hace Echenique de bendecir que escracheen los humildes maltratados por malvados de guante blanco y condenar que lo hagan los pijos pudientes, qué manía en repartir y retirar derechos según el adjetivo que al repartidor mejor le cuadre—, el escrache se define por el acoso que supone: el acoso y la invasión de la esfera privada. Los que acosan lo que buscan es que todo el mundo sepa quien vive allí para hacerle la vida imposible. Y sí, es comprensible que hoy tengan que andar clasificando los escraches en aceptables y reprobables quienes en su día alentaron que se acosara a quienes gobernaban y ahora se ven ellos mismos sufriendo el acoso: si hubieran trazado una línea roja a tiempo hoy lo tendrían más fácil para hacerse pasar por frailes”.

En RNE, el diputado de Ciudadanos que ha dimitido, Marcos de Quinto, ha explicado: "Dejo la política con toda elegancia y todo el respeto a mis compañeros y a mi partido. Sin dar portazos ni montar ruedas de prensa destructivas, con tranquilidad y naturalidad. No hay drama". "Soy coherente, ya había manifestado públicamente que estaba en contra de esta prórroga”. “Por lealtad a mi partido, voy a votar a favor de algo en lo que no creo, y posteriormente lo dejaré". "Siempre he rechazado el concepto de partido bisagra. Ciudadanos es un partido puente, lo que tiene que hacer es tratar de unir a la izquierda moderada y a la derecha moderada. Tratar de estar en el medio". "No tengo nada en contra del PSOE, de hecho tengo muchos amigos en ese partido, pero creo que Sánchez ha hecho mucho daño al PSOE y a España”.

"Inés está haciendo un viraje. Mantiene buenas relaciones con [Pablo] Casado y está haciendo algunas aproximaciones a Sánchez pero no por ayudar a Sánchez sino por ayudar a los españoles. Está tomando las decisiones que a su modo de ver piensa que es lo mejor para España". Asegura que la dirección del partido le convenció para apoyar la última prórroga del estado de alarma, por ejemplo, para que no decayeran los ERTEs. "Este segundo yo ya no lo veía, pero a lo mejor el equivocado soy yo. Pensaba que era excesivo y que lo mejor era, con muchas medidas de seguridad", “no haber dado estos 15 días más". Y ha recordado que la patronal se ha manifestado en contra de esta prórroga.  

En la COPE, Jorge Bustos opinaba: “Es evidente que Ciudadanos está arriesgando. Han decidido ser una especie de PNV de centro, es decir, pactar con el Gobierno del PSOE en el Congreso y en el PP en las comunidades autónomas e intentar sacar medidas para sus electores, como hace el PNV, pero eso es muy arriesgado sobre todo en una España muy polarizada donde vas a parecer siempre demasiado rojo para los azules y demasiado azul para los rojos. Y es verdad que quizá no hubiera podido sacar más cosas a un Gobierno que está en evidente debilidad. Para mí lo más importante es el cabreo de ERC, conseguir que ERC se separe, veremos por cuánto tiempo del Frankenstein y no condicione la política nacional. Pero sobre todo el control parlamentario. Sánchez aspiraba a estar tres meses encadenando el estado de alarma con los meses en los que es inhábil el Parlamento y por tanto saltarse encontró de la oposición. Ahora tendrá que estar hasta julio incluido respondiendo cada quince días de sus medidas. Aun así, creo que Ciudadanos debe apretar más si no quiere aparecer como el tonto útil del Gobierno de Sánchez, debe pedir cosas como por ejemplo el tema del turismo, ser más duro con las medidas económicas. Está bien la moratoria fiscal pero creo que debe subir ese tono porque arriesga mucho en esa estrategia”.

Antonio Naranjo señalaba: “Creo que Inés Arrimadas se tendría que hacer la pregunta del almirante Méndez Núñez, aquello de ‘más vale honra sin barcos, que barcos sin honra’. Porque al final te quedas sin honra y sin barcos. Me parece a mí que los cálculos casan mal ahora con el momento político actual”. “Lo correcto, según el discurso de Ciudadanos hasta ahora, había sido no renovar un estado de excepción democrática que no era necesario para la prevención sanitaria. El viraje no atiende a cuestiones médicas, por tanto, sino a estrategias políticas que a mí me parecen totalmente equivocadas. No puedes decir una cosa y hacer luego la contraria cuando tú mismo suscribes la existencia de alternativas sanitarias que no necesitan poner en hibernación la democracia, como está pasando en este país”.

En Onda Cero, Fernando Ónega decía: “Sánchez, como le pide Esquerra y ayer le pidió Ciudadanos, tiene que elegir socio preferente. Pero el resultado no depende solo de él y de su voluntad.

Depende de Esquerra, que planteará avances soberanistas y la mesa de diálogo con Cataluña. Depende de Unidas Podemos, que no está claro que acepte como socio a un partido que se define como liberal. Y depende de Ciudadanos, del que lo separan cuestiones esenciales, como Cataluña o la política económica.

Y Ciudadanos tampoco lo tiene fácil: apoyar a un gobierno que la derecha llama social-comunista puede provocar el rechazo de sus votantes más conservadores. No apoyarlo puede hacerle perder el papel que está reconquistando de instrumento útil para la gobernación, quedarse en tierra de nadie y pasar a ser un partido irrelevante.

Hoy, con diez diputados, tiene relieve. Hoy sirve para algo. Sirve para que haya gobiernos conservadores en importantes autonomías y para que Pedro Sánchez no sufra la humillación de una derrota y no sea rehén del independentismo.

Conclusiones perfectamente provisionales: primera, entramos en un tiempo dudoso. Segunda: Sánchez no elegirá libremente, sino forzado por las condiciones que le imponga el socio buscado. Tercera: a Sánchez le gustaría rehacer el bloque que le llevó al gobierno y lo está intentando. Y cuarta: si eso resultase imposible, le gusta mucho más resistir de acuerdo con su trayectoria y mantenerse en el poder”.

En la SER, Angels Barceló opinaba: “El Congreso debate y vota esta mañana la quinta prórroga del estado de alarma. El Gobierno se ha asegurado los votos de Ciudadanos. Ines Arrimadas se confirma como una hábil negociadora que sabe sacar un extraordinario rendimiento de sus diez diputados y confirma el giro del partido tras la salida de Albert Rivera, tanto que por el camino se ha dejado a Marcos de Quinto, histriónico y maleducado diputado, símbolo de lo que era Ciudadanos cuando Rivera estaba al frente.

Y, además, la negociación con Ciudadanos se convirtió en magia. El decreto que el Gobierno tramitó y que prorrogaba el estado de alarma hasta el 27 de junio se convirtió de golpe en un decreto que lo prorrogaba solo hasta el 7 de junio. Ciudadanos le había dicho a Pedro Sánchez que eligiera, y eligió los votos de la formación naranja y, de rebote, los independentistas de Esquerra, que insisten en la mesa de diálogo como condición, se convierten en prescindibles. O Ciudadanos o nosotros y, al menos hoy, el Gobierno ha elegido Ciudadanos.

Con este movimiento, además, Arrimadas se aleja de Pablo Casado, que ya hace tiempo se apartó de la ecuación que hace posible los acuerdos y sigue radicalizando su mensaje incapaz de resistir la presión de la ultraderecha. Tan fuera de la realidad está, tan alejado de la política imprescindible en estos días que ayer llegó a vincular la prórroga del estado de alarma a sacar de la cárcel a los presos de ETA. Lo han oído bien, ETA y coronavirus en la misma frase, esto solo lo puede hacer el PP de Pablo Casado.

Y, mientras tanto, prórroga tras prórroga vamos descubriendo pistas de como puede ser la continuación de la legislatura”.