José Luis Escrivá (RNE): “El Gobierno, antes de la crisis tenía un plan fiscal con subidas de impuestos; lo habíamos anunciado”

En RNE, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha asegurado que el último Consejo de Ministro del mes aprobará el ingreso mínimo vital, mediante decreto ley. "El debate ya se está produciendo en la sociedad, yo ya lo estoy teniendo con los colectivos sociales. Ha de haber un debate extenso sobre un tema tan importante".

El ministro ha explicado que se están haciendo esfuerzos para que a partir del conocimiento de hogares vulnerables que se sepa que cumplen las condiciones, "reconocerlo de oficio para arrancar con un número importante de hogares que reciban la prestación", al menos 100.000 hogares. "Es un intento".

Cerca de un millón de hogares podrán beneficiarse de esta nueva ayuda. "Dependerá del ritmo de las peticiones, intentaremos resolverlas lo antes posible", explica el ministro, y añade que la gestión será "multicanal", para poderlo solicitar por distintos canales y que ningún hogar que lo necesite se quede fuera.

Según el ministro, la renta se cobrará mensualmente, y para definir a los beneficiarios habrá un "test de patrimonio neto agregado" que excluirá la vivienda habitual. "Las rentas mínimas de cada comunidad autónoma complementarán nuestra renta y serán subsidiarias a la misma", asegura Escrivá.

El ministro destaca que la situación de pobreza severa en España "no es aceptable", como reconocen las instituciones internacionales. "Poner en marcha una prestación de este tipo [como la renta mínima] es muy complejo, porque hay que identificar a los hogares marginales, y para hacerlo bien y evitar que haya quien se quiera aprovechar, no se puede improvisar".

El coste final será de 3.000-3.500 millones de euros financiada vía presupuestos. "El Gobierno antes de la crisis tenía un plan fiscal con subidas de impuestos, en parte para sufragar políticas como esta, y otras prioridades de política del Gobierno, y para reducir el déficit público a niveles del 1%”. “Todo eso lo habíamos anunciado, ahora lo que se produce es un aumento del gasto público transitorio e intenso, y va a haber que financiarlo con deuda pública. Habrá que separar los gastos extraordinarios por el COVID con la confluencia a niveles de déficit público más bajo, que habrá que retrasarlo”.

Escrivá cree que el acuerdo de gobierno con Podemos es el marco adecuado, y que el gasto relacionado con el COVID debe financiarse con cargo al déficit y financiarse en los mercados, y no con un nuevo impuesto. "No parece que los mercados tengan dudas de nuestra capacidad de financiar este aumento transitorio de deuda para pagar los gastos de la COVID”.

Afirma que "para la magnitud del parón de actividad" el aumento del desempleo es moderado. "El Gobierno va a retomar, en cuanto pase esta urgencia, su intención de crear, junto al Pacto de Toledo, un marco estable a medio plazo donde las pensiones mantengan su poder adquisitivo”.

En Tele 5, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado que las fases de la desescalada "no están claras". "¿Quién decide por 7 millones de personas que tenemos que seguir estancados?", se pregunta, y asegura que la Comunidad puede llegar a 20.000 pruebas PCR.

"Tenemos nuestra propia estrategia serológica y estamos dando mascarillas a los ciudadanos", asegura. "Hay que aprender a vivir con el virus, con precaución".

"Las personas lo que quieren es que les des explicaciones. En la primera parte, todo el mundo lo entendió y se quedó en casa. Pero ahora, ¿por qué?", asegura Ayuso, y pide "proteger a los vulnerables, a los mayores" con "políticas creativas", y tratarles "como si estuvieran en una urna".

"Si es verdad que nos faltan cosas, lo que tiene que hacer el Gobierno es ayudarnos". "Tenemos todos los medios, y les hemos desmontado punto por punto este informe", asegura.

"Si se para Madrid, se para España, aportamos el 20% del PIB, somos una locomotora que arrastra a las demás".

Ha contado que cuando preguntó a Sánchez quién redacta los informes, este dio paso al presidente de Castilla y León, y que el informe se filtró mientras ella daba una rueda de prensa.

Y propone crear horarios preferentes para los mayores en tiendas, darles prioridad en la calle y mascarillas, para darles "más libertad".

La presidenta de la Comunidad de Madrid asegura que quiere explicaciones "hoy" y no cuando las comunidades pasen a Fase 1. "Demuestran que son decisiones arbitrarias e improvisadas", declara.

"Yo no he dejado de traer aviones en todos estos meses con material". "El Gobierno de España ha perdido más de 300 millones de euros en compras fraudulentas. Hemos sido los que hemos dado material de protección a los sanitarios", asegura Ayuso.

"El PSOE actualmente tiene a Madrid en el punto de mira. Vamos en sentido contrario ideológicamente. En Madrid nos hemos dado una forma de vida diferente ideológicamente a lo que pretenden en la Moncloa". "La Moncloa lo conforman dos equipos: uno que aplicó la política en la Andalucía socialista y otro que cree que la política a aplicar es la que aplican en Caracas".

En TVE, Pablo Montesinos, vicesecretario de Comunicación del PP, entiende "el enfado y la indignación" de la sociedad española, con el que relaciona las protestas contra el Gobierno en el barrio de Salamanca de Madrid. Asegura que hay un "doble rasero" del Ministerio de Interior que lamentó estas manifestaciones pero no "la de Navarra por un preso de ETA". Pide que las protestas se hagan manteniendo "la distancia social".

Montesinos explica que el PP va a votar "no" a la prórroga del estado de alarma este miércoles. "Es falso, es mentira de que la alternativa es el caos. Lo dicen destacados juristas". "Lo que proponemos es que con el ordenamiento jurídico vigente se puede mantener el mando único sanitario sin necesidad de estado de alarma", añade.

"Hay un Plan B pero el señor Sánchez está muy a gusto con este estado de alarma", insiste el portavoz del PP, quien asegura que "no hay ya ningún país de nuestro entorno que mantenga el estado de alarma como lo mantiene España".

"El PP lleva argumentando esto desde hace varias semanas pero Sánchez no se ha interesado en buscar un consenso, un pacto de Estado. No nos ha llamado ni una sola vez", asegura Montesinos.

Y asegura que "Ayuso preguntó a Sánchez en la reunión el nombre de los expertos y que se conozca los criterios para el resto de comunidades. Sánchez no contestó". "El objetivo de la Comunidad de Madrid es garantizar la salud de todos los madrileños y abrir la economía, porque Madrid es la locomotora de España", insiste el portavoz del PP. Asegura que hoy mismo, la Comunidad de Madrid va a enviar un nuevo informe al Gobierno para demostrar que está preparada para pasar a Fase 1.

Montesinos dice que la Comunidad de Madrid recibió el informe del Gobierno mientras el presidente, Pedro Sánchez, lo revelaba en rueda de prensa. "Si el Gobierno asegura que no se debe a criterios políticos, que publique el informe y el nombre de los expertos", subraya.

En Onda Cero, Carlos Alsina opinaba: “Algunos, por cierto, se pasearon haciendo ruido, este fin de semana, por delante de la casa de los Iglesias Montero en Galapagar. Una especie de escrache desmadejado y paseante. El derecho a protestar es compatible con el derecho a dejar en paz a todo el mundo en su casa. Por muy vicepresidente o muy ministra que sea. Dejar en paz a los padres y dejar en paz a los críos, que viven dentro.

Al vicepresidente Iglesias lo entrevistó Matías Prats en Antena3 y se esforzó en parecer humilde al admitir que no todo lo ha hecho bien. Quizá lo más llamativo de su parrafada fue que utilice la expresión 'hacer política' como algo negativo.

Que un político profesional diga que no hay que 'hacer política' en el sentido en que Iglesias lo dice es revelador. Revela que 'hacer política' para él es la gresca política. Por eso cree que ahora no toca. Aunque a renglón seguido le pregunte Matías por las residencias de mayores y atribuya el desastre a la empresa privada y al PP.

Hay más de cinco mil residencias de mayores en España. Ni en todas ha habido dejadez, ni en todas ha habido muertes, ni todas son privadas, ni todas son propiedad de fondos de inversión. Ni está demostrado que la causa de los fallecimientos sea quién es el dueño. Pero una vez lanzada la proclama, un minuto después exactamente de cargar contra el PP, vuelve el vicepresidente a reclamar que no se haga política sobre lo que ha pasado.

Cómo predicar lo contrario de lo que uno acaba de hacer. No es el único dirigente político que lo hace, por supuesto que no (quién no lo hace en realidad), pero en el vicepresidente segundo es especialidad de la casa".

En Onda Cero, Fernando Ónega señalaba: “La dirección política no se rige o no se debiera regir por manifestaciones, pero hay que tenerlas en cuenta, sea cual sea su orientación ideológica. Representan el sentir de una parte de la sociedad.

Las que hemos visto este fin de semana son de signo conservador y oscilan entre Vox y el PP, como se demuestra en los gritos de "gobierno o Sánchez dimisión" y en el uso de la bandera nacional. No han sido masivas, en todas ellas se habla de cientos de personas. Empezaron como una anécdota colorista en la calle Núñez de Balboa de Madrid. Se tomaron como la expresión de pijos y privilegiados –esas fueron las primeras calificaciones-- que odian a un gobierno de izquierdas. Pero se están extendiendo como una mancha de aceite por varias ciudades y comunidades autónomas. No es fácil atenderlas, porque, además de exigir la caída del gobierno, no se sabe qué piden ni cuál es su interlocutor. Entiendo que no hay que magnificarlas, pero tampoco ignorarlas.

No hay que magnificarlas, porque solventes encuestas dicen que la mitad de la población respalda la gestión de la crisis por parte de Pedro Sánchez. Pero no hay que ignorarlas porque pueden representar a la otra mitad y porque pueden ser el preludio de otras movilizaciones. No olvidemos que un informe de la Guardia Civil prevé agitación social cuando sean graves los efectos económicos y sociales de la crisis. Y lo que pido a la clase política es que no contribuya con sus discursos de agravios a esa agitación".

En Onda Cero, Rubén Amón lanzaba sus preguntas: “¿Creéis verosímil que Sánchez pretenda cercar Madrid para escarmentar a los madrileños en nombre de Ayuso, sitiarnos, cercarnos?

Yo no lo creo, no, ¿pero no deberían ser más transparentes los diagnósticos de la fase cero y menos evidentes los tratos de favor a otras comunidades?

Se lo preguntaba de otra manera ayer Nacho Cardero en El Confidencial. ¿Qué hubiera sucedido si Urkullu fuera presidente de la Comunidad de Madrid? Independientemente de la respuesta, a mí la idea me gusta. O sea, la idea de Urkullu presidente de la Comunidad de Madrid.

De momento, tenemos a Ayuso. ¿No os parece que está imitando todos los clichés victimistas del soberanismo? Del victimismo a la representación del pueblo. Va a terminar diciendo que Madrid nos roba.

No quiero robarle el trabajo a Latorre, pero ¿no es fascinante que El País reúna en sus páginas juristas cualificados que defienden la prórroga estado de alarma y El Mundo reúna a juristas no menos cualificados que sostienen exactamente lo contrario?

¿Tenía razón Rubalcaba cuando decía que en España se entierra mejor que en ningún sitio? Ahí tenéis el ejemplo de Julio Anguita”.

En la COPE, el economista José María Gay de Liébana destacaba: “Nuestro Gobierno está deseando ferviente y entusiastamente que la economía española y nuestras empresas recobren su pleno vigor, aunque lo disimule amenazando, so pretexto de reconstruir económicamente España, con subidas de impuestos a los despectivamente tildados como ricos, apelando a una mal entendida solidaridad. La solidaridad hay maneras de practicarla sin necesidad de confiscar patrimonios privados ganados a pulso, con sudor y esfuerzo, trabajando – no politiqueando - creando riqueza para España y muchos miles de empleos. Por ejemplo, esa solidaridad patriótica se ejerce costeando compras de material sanitario, que nuestro Gobierno no hace, y fletando aviones desde China. Quizá esos, con desdén, tildados de ricos sean quienes donan cientos de millones para que nuestros hospitales públicos dispongan de maquinaria para combatir el cáncer, que el Estado no paga pese a elevar el gasto público.

La reconstrucción económica no pasa por succionar recursos privados para llevarlos a las cañerías del gasto público profuso, confuso y difuso. Verbigracia: las cuentas del Estado de 2018 están en duda. El Tribunal de Cuentas formula salvedades que suman 9.000 millones de euros, resultado hinchado y concluye que la Seguridad Social está en quiebra al ser su patrimonio neto negativo. Nuestro Gobierno está deseando con ardor y sensibilidad en la desescalada, el impulso de nuestra economía. De no ser así, se estaría gestando la nacionalización de nuestras empresas y del empleo; ergo, la intervención de nuestra economía, confluyendo en una economía sovietizada, paradójicamente dentro de la Unión Europea, y, es de suponer, que con ciertos políticos presidiendo compañías del Ibex 35, que, desde luego, imprimirían un toque progresista de enorme calado”.

En la COPE, Pilar García de la Granja comentaba: “El presidente del Gobierno hace dos sábado explicó, sacando pecho, que es que ellos iban cada quince días al Congreso a pedir la renovación del estado de alarma porque así se lo pedía la Constitución. Y como lo repitió 18 veces, simplemente hay que poner esas declaraciones otras 18 veces. Y dicho eso: un mes de estado de alarma, para sumarlo a dos meses de vacaciones en el Parlamento, para volver en septiembre. A mí me parece una barbaridad”.

El juez José Antonio Vázquez Taín apuntaba: “En la desescalada y cuando los demás países ya han abandonado las medidas excepcionales, y entiendo que funcionando el Congreso ya no existe motivo para algo tan excepcional, tan limitador de derechos, como el estado de alarma. Por esas dos formas: porque la prórroga la entiendo excesiva y porque no existen los requisitos”.

Ignacio Camacho también cree que el Gobierno va a sacar otro mes de estado de alarma “y nos vamos hasta septiembre con el Parlamento cerrado. Ciudadanos se ha convertido en la pieza de repuesto por si falla un brazo de Frankenstein y creo que si Urkullu gobernase en Madrid, Madrid estaría en la fase que quisiera”.