Resumen de tertulias y entrevistas en radio y TV (18/02/2019)

En Onda Cero, la eurodiputada Maite Pagazaurtundúa ha analizado el rechazo Antonio Tajani a que se celebrase en el Parlamento Europeo un acto de Carles Puigdemont. "El escándalo que se pretendía generar allí no era tolerable", comenta y añade que "en ese parlamento no se permite el juego sucio de los independentistas contra la España democrática".

Por otro lado, confirma que "hay conversaciones entre UPYD y Ciudadanos, para ver si se ponen de acuerdo en candidaturas conjuntas. Además, explica que "en el Parlamento Europeo llevan ya tiempo trabajando juntos para defender esta España democrática". Asimismo, aboga por conseguir el apoyo de todas las fuerzas constitucionalistas.

En cuanto a la expulsión de Venezuela de una delegación del Partido Popular Europeo que iba a reunirse con Guaidó, Pagazaurtundúa apunta que "es una verdadera barbaridad que el régimen de Maduro no entienda que tiene los días contados. Afirma que "tiene que permitir que entre la ayuda humanitaria, unas elecciones y una transición democrática" y declara que "allí sí que hay presos políticos".

En Onda Cero, Carlos Alsina comentaba: “Empezó Sánchez el viernes convirtiendo el atril de la Moncloa en una sucursal de Ferraz. La presidencia del gobierno empleada para fustigar a la oposición y pedir el voto. Ya dice el presidente en el libro que le ha escrito (o transcrito) Lozano que el hecho de que algo nunca haya sucedido antes no significa que no pueda suceder. En esto también ha sido pionero: media hora de jabón a sí mismo y de cera a sus adversarios políticos antes de anunciar la fecha de las elecciones y de instar a los españoles a que le voten a él. Quién necesita un comité electoral teniendo al jefe de gabinete, y al gabinete entero, ocupado ya en hacer campaña. Dos meses hasta las elecciones. Dos meses con los ministros predicando la buena nueva del progreso social y el nostradamus de que vienen las derechas. De la derecha trifálica de la ministra Delgado al gobierno franconstein que dice Iceta, contagiado de la lesión ocular de sus interlocutores independentistas que les lleva a ver franquistas y fascistas por todas partes: 'en ocasiones, veo franquistas'. Que ojo, Iceta”.

Rubén Amón, en Onda Cero, se preguntaba: “¿Ha anunciado ya Pedro Sánchez la fecha de las elecciones generales? Empezó a las 10 de la mañana del viernes su comparecencia, y creo que todavía no ha terminado”. “¿Puede ocurrir que haya sido Pedro Sánchez el último en enterarse de su propia convocatoria? ¿Cuál es la influencia que pueden ejercer las elecciones del 28 de abril sobre las del 26 de mayo? ¿Es consciente Sánchez de que ha sido presidente del Gobierno después de haber perdido las legislativas y que puede dejar de serlo ahora después de ganarlas? ¿Os explico por qué? Pues porque ya no se trata de ganar, se trata de sumar. Y hablando de sumar, ¿sabías que hay votantes de Podemos que están dispuestos a votar a Vox? ¿No os parece bonito el gesto institucional del Real Madrid hacia al deshielo del soberanismo? Por la mañana pierde en casa contra el equipo de Puigdemont. Y por la noche le entrega la copa del Rey, insisto, del Rey, al Barcelona de baloncesto”. 

En la SER, José María Izquierdo afirmaba: “Mucho nos queda, al menos a quienes damos la cara a diario, hasta las elecciones del 28 de abril, pero conviene que vayamos desbrozando conceptos que nos impiden ver lo evidente, como los ramajes de la selva nos ocultan el camino de salida. Verán ustedes, aquello que asoma por el horizonte, la fiel infantería primero, los señoritos caballistas a continuación, y al final los arqueros, hoy con fusiles de asalto, es la derecha más derecha, en tan íntima coyunda con la más extrema que ni los ornitólogos más avezados son ya capaces de discernir al jefe de las aves rapaces de un pelaje de las del otro. Se ríen de la transversalidad, orgullosos de ser de derechas de toda la vida y español, español, español. Descubierta esta tropa, ¿qué debe hacer la izquierda?”.

En la SER, Pepa Bueno opinaba: "Comienza la cuenta atrás. Con el modo pre-electoral activado en todos los partidos, hoy reúnen a sus ejecutivas para diseñar la estrategia para el 28 de abril. Todo pasa muy deprisa y estamos acostumbrados ya a contemplar verdaderas contorsiones de los líderes políticos según lo que les van diciendo las encuestas. Pero de momento, este primer fin de semana hemos visto a la derecha centrar todos los discursos en la crisis catalana. Pero no en las propuestas de solución de un problema español muy serio, sino en la exhibición del músculo del macizo de la raza, como si eso hubiera resuelto algo alguna vez. Porque ni PP ni Ciudadanos, han contado hasta el momento, qué proponen para el día después del 155. Lo que quieren sus socios andaluces de Vox, sí lo sabemos.

Y la izquierda, por lo visto y oído este primer fin de semana intenta taponar con las palabras diálogo y consenso, la sangría de votos que puede costarle la crisis catalana en el resto de España, pero ojo que las encuestas publicadas este fin semana aseguran que la mayoría de los españoles quiere diálogo y consenso, no mano dura sin más. Veremos. Izquierda que pone el acento en una agenda social muy ambiciosa, aunque luego, el ejercicio del poder demuestra que hay que aterrizarla en la realidad.

Todo muy esquemático y muy previsible en este comienzo de campaña, esperemos que empiecen a tratarnos como adultos más adelante. Y todo peligrosamente dividido en bloques, cuando todos sabemos que nada de lo fundamental lo vamos a arreglar sin acuerdos transversales”.

En la COPE, Francisco Rosell decía: “Llevamos nueve meses de precampaña, ahora empieza la segunda parte de la campaña electoral. Vamos a ver qué cuerpo lo aguanta y sobre todo en qué queda el país después de los pactos que se van a formar porque aquí estamos ante dos bloques, o el bloque de la moción de censura, ya el domingo la vicepresidenta habló de que van a retomar las negociaciones”, “o un poco el acuerdo que se puede producir en la línea de lo de Andalucía, ese es el dilema al que nos enfrentamos”.

Ignacio Camacho apuntaba: “Ligerísima ventaja de la Plaza de Colón pero ahora mismo no se puede especular sobre esto porque el resultado fue muy apretado. El presidente Sánchez suscita desconfianza, hasta fobia, pero no da miedo y eso le beneficia, a pesar de que lleva de socios a Podemos”.

Pilar García de la Granja señalaba: “Aquí se va a plantear una campaña electoral más dura que nunca entre buenos y malos. Entendido desde Moncloa que por supuesto los buenos son ellos, y por lo tanto hay que llevar a cabo una negociación con los independentistas y hay que hacer políticas mucho más sociales porque nadie me ha aprobado los presupuestos. Y los malos son fachas y son todos los demás, yo creo que eso ya no cuela”.