Resumen de tertulias y entrevistas en radio y TV

La Mesa del Parlament de Cataluña aprobó ayer  -con los votos de JxCat y ERC-  el inicio de los trámites para para modificar la Ley de la Presidencia de la Generalitat y acabar con la obligatoriedad de que el candidato a la investidura esté presente en el pleno. Además el cambio legal que impulsa Junts per Catalunya permitiría que el futuro Govern pueda celebrar reuniones telemáticas. 

En Onda Cero, Miquel Iceta (PSC) decía: “"Yo no hubiera decretado prisión preventiva a Jordi Sánchez, pero tampoco le haría president. Ni a Turull [porque también está imputado]". Hay que nombrar president a alguien que pueda ejercer sin cortapisas [no imputado]". "Pero no parecen tener prisa". 

También ha explicado su decepcionante resultado electoral: "Creo que fue por la polarización. Un amigo me dijo que me había adelantado varios capítulos con mis soluciones". "Una repetición electoral sería como decirle a los ciudadanos que no han votado bien".

En cuanto al éxito de Cs, ha afirmado: "El partido responsable de que esté Rajoy en el poder quiere ( y tiene mucha prisa por hacerlo) sustituir a Rajoy. No quiero regatear méritos a Albert Rivera, pero la cosa tiene su guasa". "Podemos (que nos echó del ayuntamiento de Barcelona) perdió su oportunidad de ser alternativa de gobierno. Y eso explica su [mala] situación actual".  

Antonio Papell, también en RNE, comentaba que “estamos en un callejón sin salida francamente preocupante”. “Ayer se aprobó el proyecto de reforma de la ley de presidencia, para poder investir a personas que estén en el extranjero y para poder utilizar vías telemáticas para participar en los plenos. Si se llegara a aprobar eso, supondría de nuevo plantar cara al TC e incurren en nuevos delitos”. “Deberíamos volver desde la justicia a la política. El asunto está ahora en manos de los tribunales, pero creo que habría que reconsiderar la aplicación del artículo 155 en el sentido de decir, hasta aquí hemos llegado”, “e ir al modelo norirlandés”. 

En RNE, Justino Sinova opinaba que “estamos exactamente al final de tres meses de sufrir una broma muy pesada de los independentistas catalanes, que tienen la intención de continuar en su actitud absolutamente irresponsable, que gracias a que hay una sustitución de los órganos de la comunidad autónoma, que no puede ser tan eficaz como debería ser un gobierno autonómico”, “nos tiene paralizados ante una discusión política que no tiene ningún interés para la mayoría de la gente”. “A ver si alguna vez estos tipos que nos están tomando el pelo de esta manera, pagan sus fechorías”. 

En Onda Cero, Casimiro García Abadillo afirmaba que “estamos en el capítulo 90 del serial y esto ya se está convirtiendo en un tema para iniciados. Que de nuevo se recurre ahora ante la sala del Supremo la denegación de libertad de Sánchez y Forn, y que a la vez se va a tramitar en el Parlament una reforma de las normativas que lo rigen para que se pueda asistir a un pleno telemáticamente. Lo cual apunta a Sánchez, eso está pensado para que Sánchez pueda ir a la sesión de investidura o no”. “Y que pueda dar lo mismo y que pueda ser elegido presidente de la Generalitat y regir los destinos de Cataluña desde la cárcel, vía telefónica op or ordenador”. “Es un capítulo más de este serial que si no fuera porque es trágico sería cómico”. 

Paco Marhuenda, también en Onda Cero, explicaba que “la realidad judicial dice que les van a caer un montón de años, y que en cumplimiento real van a estar alrededor de diez años, que es lo que se va a establecer”. “Ha habido una rebelión, ya veremos en qué grado el juez instructor determina, y a partir de ahí les caerá una sentencia”. “Esa realidad judicial está ahí y no la puedes soslayar, han cometido delitos gravísimos”. “Los catalanes teníamos fama de gente seria, prudente y eficaz y nos hemos convertido en la burla”. “Lo que habría que decir es se disuelve y se vuelven a convocar elecciones”. 

Rubén Amón, en la misma emisora, apuntaba que “vamos camino de los seis meses del 155 y me parece que la gran paradoja del soberanismo es que la promesa de independencia ha quedado subordinada a la consolidación de la suspensión del autogobierno. O sea, que lejos de haber prosperado en el camino de la patria nueva, se ha conseguido que se ha suspendido la autonomía de Cataluña. Y creo que el acomodo que han encontrado en esa paradoja es insostenible delante de sus votantes.