Abogados Cristianos denuncia que hace unos días se hizo público el cartel de Sevilla para el Orgullo 2023 del Ayuntamiento gobernando por José Luis Sanz (PP), que utilizaba la imagen de las patronas de Sevilla, santas Justa y santa Rufina, para reivindicar un estilo de vida al que ellas mismas se habrían opuesto.
En él, las santas aparecen ataviadas con coloridos trajes y rodeadas por cintas de la bandera arcoíris. Ambas aparecen colocadas sobre el abanico de un activista sevillano LGTB.
La asociación de juristas denuncia que "es una vergüenza que politicen la imagen de estas santas, asesinadas por rechazar las idolatrías de su época".
Por eso -explica Abogados Cristianos- hemos lanzado una campaña para pedirle a José Luis Sanz que retire inmediatamente este cartel en el que se usa indebidamente la imagen de las patronas de Sevilla.
Lo cierto es que hechos como este se enmarcan en una obsesión global que practica incluso la Iglesia alemana con su teología de la bragueta: estamos en la ideología de género, algo mucho peor que el marxismo, porque este afectaba a la vida social mientra el 'gender' atenta contra la antropología individual. Al final, el cisma alemán consiste en ordenar sacerdotes a homosexuales y trans (y contra eso me temo que no resulta oportuno insistir en la obviedad de que el celibato no es sino una norma temporal) y cambiar el catecismo, no para respetar al homosexual sino para aplaudir la homosexualidad.