Comenzamos esta crónica semanal sobre persecución a los cristianos en Birmania, donde miembros del grupo étnico predominantemente cristiano de Chin se encontraban entre los asesinados en ataques aéreos del ejército birmano el pasado mes de marzo, lo que llevó a algunos líderes de la iglesia a especular que los cristianos fueron atacados debido a su fe, publica Christian Post.
En el municipio de Paletwa, estado de Chin, el ejército birmano atacó el 14 de marzo a la aldea de Meiksa Wa, matando a 12 civiles, según Morning Star News. Ocho más murieron en ataques al día siguiente en la aldea de Wetma, y uno murió en la aldea de Pyaing Tain. Entre los asesinados había un niño de 7 años, dijeron los lugareños.
Los militares birmanos afirmaron que las aldeas predominantemente cristianas fueron atacadas porque el personal del ejército creía que los rebeldes del ejército de Arakan del estado de Rakhine, en la frontera sur del estado de Chin, se habían refugiado en ellas.
Bajo el régimen militar anterior, las tropas llegaron a pueblos predominantemente cristianos y persiguieron sistemáticamente a los creyentes
Sin embargo, los líderes cristianos de Chin expresaron la creencia de que, en función de la persecución pasada que han sufrido a manos de los militares, el personal del ejército disparó indiscriminadamente contra las aldeas porque los habitantes eran cristianos. Bajo el régimen militar anterior, las tropas llegaron a pueblos predominantemente cristianos y persiguieron sistemáticamente a los creyentes, destruyendo iglesias en el proceso.
Y de Birmania nos vamos a la India, donde una gran multitud de animistas tribales golpeó brutalmente a los cristianos que se negaron a cumplir con sus demandas de sacrificar animales a las deidades y renunciar a su fe, informa Christian Post.
"El consejo del pueblo nos convocó a una reunión exigiendo que trajéramos una cabra, cerdo, gallina, coco, varitas de incienso y efectivo de 5,000 rupias como ofrendas de sacrificio a las deidades tribales", dijo un cristiano de nombre Markam a Morning Star News.
Los cristianos se niegan a participar en el ritual de sacrificar animales a los ídolos animistas
Cuando se negaron a ceder a sus demandas, la mafia irrumpió nuevamente en la casa de Markam la noche siguiente y comenzó a golpear a sus padres ancianos.
"Me escapé de allí y me he encontrado con el bosque", dijo. “Volveré solo después de conocer la situación allí en casa. Tengo mucho miedo de volver a casa ahora. Nos golpearon ayer y vinieron de nuevo hoy. Mi vecino cristiano Raju Podiyami y su familia también fueron atacados hoy ”.
"Los cristianos se niegan a participar en este ritual", dijo el abogado Singh Jhali. "Esta ha sido la razón principal del aumento de los ataques violentos contra los cristianos en medio del encierro".
La semana pasada, se informó que los animistas en el distrito de Bastar, Chhattisgarh, dijeron a cinco familias cristianas que perderían sus tierras de cosecha a menos que volvieran a su religión tribal. Cuando los cristianos se negaron, fueron golpeados.
Pakistán: destrozan un templo cristiano aprovechando la cuarentena por coronavirus
Y en Pakistán, el pasado 9 de mayo, un grupo liderado por Awan Abbas y Ali Shan, terratenientes, armados con rifles, entraron en un templo protestante pentecostal de Hukampura y provocaron destrozos. La cruz presente en el lugar de culto fue destruida, informa Asia News y recoge Infocatólica.
Los asaltantes aprovecharon que el templo estaba vacío debido a la cuarentena impuesta por la pandemia de coronavirus. El grupo comenzó a gritar consignas contra los cristianos y a destruir los muros de la iglesia, deshonrando y rompiendo la cruz.
La noticia se extendió por todo el país, causando ira y tristeza entre los cristianos. La comunidad cristiana exige al Primer Ministro y al gobierno una mayor protección para las minorías de Pakistán y exige justicia para los profanadores.
La comunidad cristiana exige al Primer Ministro y al gobierno una mayor protección para las minorías de Pakistán
Boota Masih, un cristiano local, dijo a Asia News que el grupo de matones, después de demoler los muros y la cruz, desafió a todo el mundo y amenazó con la violencia, pero huyó tan pronto como se enteraron de que venía la policía. «No fue sólo la cruz la que se rompió: nuestros corazones también fueron aplastados», dijo.
Tariq Masih Gill, miembro de la Asamblea Provincial del Punjab, visitó la iglesia afectada. «La cruz que fue profanada -dijo- tiene gran importancia y valor tanto en el cristianismo como en el islam. Los culpables no sólo han deshonrado nuestra fe, sino también nuestra bandera nacional, que también representa a las minorías».
Los oficiales superiores de la comisaría aseguraron su total compromiso con el caso y prometieron llevar pronto a los autores ante la justicia. Hasta la fecha, sin embargo, no ha habido arrestos. La policía está buscando a los autores, pero parece que han huido de la ciudad. Los cristianos han decidido hacer manifestaciones para exigir justicia.