Decíamos en Hispanidad que, el experto en inmigración, Rubén Pulido era entrevistado por el conocido es youtuber español, Wall Stree Wolverine (Víctor Domínguez Burguillo) creador de contenido sobre economía, política, social, para tratar, precisamente, sobre inmigración. Sobre Pulido escribimos en Hispanidad cuando este experto en inmigración, explicaba que un inmigrante senegalés seguía cobrando más de 50.000 euros en subvenciones públicas de España... ¡en Senegal!

Pues bien, Pulido, exponía cómo las redes criminales se lucran con la desesperación de miles de personas que buscan una vida mejor, y analiza las implicaciones económicas y sociales de este fenómeno.  

Ahora sabemos que, en el conjunto de España, el incremento en la llegada de migrantes de forma irregular ha sido de un 137 % en los primeros cinco meses del año hasta llegar a las 21.926, un aumento impulsado por el pico en el número de migrantes que arribaron a Canarias a comienzos del año. Mientras, en Canarias, la llegada de inmigrantes irregulares ha subido un 259,6 %, respecto al año anterior, según datos publicados por el Ministerio del Interior. 

De la cifra total de llegadas irregulares a toda España, la gran mayoría (20.854) lo han hecho por vía marítima, 12.042 más que en los primeros cinco meses de 2023.

 

 

Pero no sólo en Canarias se sufren las consecuencias de la inmigración ilegal. Pulido ha participado recientemente en la Comisión sobre la multirreincidencia de Barcelona donde aseguró que “para combatir el problema de la multirreincidencia en Barcelona de los últimos años, es necesario ir al origen de la problemática. Su origen no lo tenemos en Barcelona, se encuentra en la inmigración ilegal masiva y el descontrol que hay detrás que todos esos movimientos migratorios que al final se traducen en la incidencia delictiva que tenemos en las calles de la ciudad condal y que va a ir in crescendo en los próximos años”.

Pulido explicó que “la ley de extranjería permite las expulsiones, pero quien no permite las expulsiones es el estado emisor de esa inmigración como sucede con Mohammed VI. Las fiscalías y los juzgados están llenos de decretos de expulsión, que no se pueden ejecutar. La ley de extranjería es útil para hacer una expulsión, pero si el que establece las cuotas de expulsión es el estado emisor de esa inmigración, es una batalla perdida no se está cumpliendo la ley de extranjería tal cual está como contemplada”.

En este sentido, Rubén Pulido recuerda que la mayoría de los casos ni tienen derecho a asilo, ni a protección internacional y deben ser expulsados, pero el atasco actual y esos países de origen son los que no permiten que se agilicen esas expulsiones. “Debemos mejorar las relaciones exteriores sobre todo con Marruecos y también con Argelia que hay unas diferencias diplomáticas en estos momentos enormes para que esas expulsiones se puedan llevar cabo. No es de recibo que es un país emisor de inmigración ilegal nos diga cuántos de sus nacionales debemos expulsar y cuántos no”.