En el centro de Barcelona, a plena luz del día, un hombre de 45 años, de nacionalidad extranjera, atacó un taxi estacionado en un semáforo en rojo frente a la plaza de los Països Catalans, cerca de la estación de Sants. Utilizó una piedra de cemento para destrozar la luna frontal del vehículo, sin ninguna provocación aparente. Afortunadamente, el conductor no resultó herido.

Tal como recoge invadidos.com, una patrulla motorizada del Grupo Regional de Seguridad Ciudadana de los Mossos d'Esquadra, conocida como Guilles, que se encontraba en la zona, intervino inmediatamente al presenciar el incidente, ocurrido alrededor de la una del mediodía. El agresor opuso resistencia al arresto, lo que resultó en una lesión leve a uno de los agentes. Finalmente, fue detenido y acusado de un delito de daños y otro de atentado contra agentes de la autoridad. Al identificarlo, se descubrió que ya tenía antecedentes policiales.

Y, en Martorel, un marroquí multirreincidente que había sido detenido en 20 ocasiones,ha acabado entrando en la cárcel después de que en su último robo dejara una persona gravemente herida. Los hechos se produjeron el pasado 6 de marzo en la estación de Rodalies de Martorell, cuando el joven, de nacionalidad marroquí, tal como ha podido saber ElCaso.com, abordó a una persona con la intención de atracarla. La amenazó con un arma blanca para que le diera sus pertenencias y le provocó graves cortes en la cara y en un brazo. Efectivos de Seguridad Ciudadana de la comisaría de esta localidad del Baix Llobregat fueron hasta la instalación ferroviaria y lo detuvieron, mientras que la víctima tuvo que ser trasladada a un hospital a causa de la gravedad de las heridas.