Los hechos sucedieron en mayo de este año, pero siguen teniendo impacto por la edad de la víctima, una niña de 10 años violada por un hombre, al parecer de su "entorno cercano". La concejala de Vox, en el Ayuntamiento de Terrassa, Alicia Tomás, denunciaba el silencio en torno a los hechos preguntándose por qué no se aplicaba la Ley de Extranjería a un "inmigrante" reincidente que ya había violado a otra niña con anterioridad.

Y todo esto nos recuerda a las palabras de la ahora ministra de Asuntos Sociales en funciones, Ione Belarra, cuando, tras el asesinato del sacristán Diego Valencia en Algeciras a manos del yihadista Yasin Kanza, censuraba a Santiago Abascal y calificaba de “miserable extender el odio a un colectivo de por sí estigmatizado”, en referencia a la inmigración.

Relacionado