Que me perdonen los que me tachen de exagerado pero no puedo dejar de mostrar mi incredulidad ante la España que estamos viviendo. Es todo tan desquiciado y aberrante, como la distopía que todavía nadie ha escrito y que, sin embargo, la realidad está dejando firmada sobre mármol con la huella del día a día de los tiempos que nos está tocando vivir.
Permitan que empiece por el sórdido tema del que creo que todavía no se había dado en la historia política, o pública, de la historia de nuestra democracia. Hablo de lo de las tetas de Irene Montero, no de las suyas, sino las de todas las mujeres del mundo mundial. Al final, ahí nos tiene la moza a todos hablando de este cochambroso asunto, despistando a la sociedad de lo verdaderamente importante, que son las personas, sus vidas reales, sus problemas cotidianos. Y Pedro Sánchez tan contento, y ahora les digo por qué.
Sánchez bota de alegría con esto, y también con la vergonzante historia del Festival de Benidorm -un momento, que ahora vamos a eso-, porque las mentiras corporativas del Estado, de las que es capitán general nuestro presidente, se le vienen una detrás de otra. Ahora resulta que, de las supuestas felicitaciones de Ursula Von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea, por cumplir los compromisos y poder recibir los fondos europeos, nos vamos al desmentido de Bruselas, de que eso no es cierto. La Comisión Europea ha tenido que salir al paso y desquitarse, después de que miembros del Gobierno, como Nadia Calviño haya sacado pecho en La Sexta sobre su magnífica y eficaz gestión.
Benidorm Fest: al final vamos a tener que dar las gracias a la cantante, porque ha conseguido lo que ningún otro presidente de España había logrado aún, casi un verdadero pacto de estado, ya que los partidos políticos incluido el Partido Popular que también se brinda a estas memeces, junto a Comisiones Obreras, abogan por que se lleve al parlamento la elección de una cantante
Por lo visto no es más que una parte del protocolo formal que se aplica a todos los países y que no valora en ningún caso cómo se haya gestionando los fondos europeos que, por cierto, Pablo Casado ha avisado a Europa de descubrirá pronto el engaño del Gobierno de España. Lo malo es que esto sucederá solo cuando ya esté perpetrado y las consecuencias, caso de que las haya, las pagaremos nosotros, usted y yo de nuestro bolsillo, no la renta vitalicia de la que gozará Pedro Sánchez como expresidente -a propósito, otra vergüenza más del sistema liberal español que solo pueden decidir cambiar sus señorías y, claro, no pasará-.
Y ahora vamos con lo del Benidorm Fest, que valida al representante español para Eurovisión, y que ha ganado por lo visto una tal Chanel Tarrero gracias al temazo -como pueden apreciar- SloMo. Y fíjense bien, porque junto a lo de las tetas de Montero y esto otro, la retahíla de las malas gestiones, amén de las mentiras continuadas del Gobierno, Sánchez ha vuelto a quedar escondido bajo la escombrera de problemas absurdos que los medios y los mediocres se encargan de proporcionar. Al final vamos a tener que dar las gracias a la cantante, porque ha conseguido lo que ningún otro presidente de España había logrado aún, casi un verdadero pacto de estado, ya que los partidos políticos incluido el Partido Popular que también se brinda a estas memeces, junto a Comisiones Obreras, abogan por que se lleve al parlamento la elección de una cantante a través de una pregunta conjunta escrita, tanto en el Senado como en la Comisión de RTVE. ¡En fin, como ven, lo importante es lo importante!
Como bien acuñó nuestro Antonio Machado, somos un país de charanga y pandereta, porque cuando la realidad cotidiana de la vida de los españoles vive pendiente de un hilo dentro y fuera de España, el precio de la luz por las nubes, la gasolina en crecimiento, el paro desmesurado, la inflación hundiéndonos la previsión de recuperación económica… La realidad política está en un festival de canciones que no sé bien cómo clasificar. Vivimos en mundos paralelos, políticos por allá y ciudadanos por acá.
Y ahora vamos con una de hipocresía anticatólica. Miren, lo que no permitieron Podemos y el Partido Socialista, que se investigara el caso de las niñas tuteladas de Baleares, y cuyo Ministerio Fiscal retiró las querellas contra el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales, ahora son los mismos, junto a la Fiscalía del Estado con Dolores Delgado a la cabeza -¡y ya saben de quién depende la fiscalía!-, los que exigen y azuzan a que se investiguen los abusos sexuales de la Iglesia española. No se equivoquen, no defiendo el mal ni deseo que no se investigue, que quien lo ha hecho mal debe pagar con su responsabilidad personal que no corporativamente como pretenden los acusadores. Por lo visto, la orden de ejecución deriva de cierta investigación que se entregó al papa Francisco y a la Conferencia Episcopal Española, con el informe de 251 casos inéditos de abusos por sacerdotes, religiosos o seglares del ámbito eclesiástico.
Mi espíritu de imparcialidad me lleva a exigir también que la justicia sea igual para todos y que la vara de medir sea la misma. También animo a que la señora Delgado, junto a comunistas y socialistas, se pasen por Valencia y pregunten a Mónica Oltra, que quizá tenga algo que decir de su ex marido y las niñas que dependían directamente de él. O que dediquen recursos para el caso de las niñas tuteladas que fueron prostituidas y drogadas en la Comunidad de Madrid
Mi espíritu de imparcialidad me lleva a exigir también que la justicia sea igual para todos y que la vara de medir sea la misma. También animo a que la señora Delgado, junto a comunistas y socialistas, se pasen por Valencia y pregunten a Mónica Oltra, que quizá tenga algo que decir de su exmarido y las niñas que dependían directamente de él. O que dediquen recursos para el caso de las niñas tuteladas que fueron prostituidas y drogadas en la Comunidad de Madrid. Y podemos seguir por los centros deportivos, las sinagogas, las aulas escolares, etcétera, porque de todo hay en la viña del Señor.
Y para terminar, una pregunta: ¿por qué cuando se habla de abusos de la Iglesia se habla en general y cuando se habla de abusos en instituciones no se habla de la clase política y se buscan nombres particulares? Ahí lo dejo, por si alguien se anima a responder.
Sindicatos S.A. (Sekotia) de Xavier Horcajo y Javier Algarra. Sí, el libro ya tiene sus años y ninguno de los líderes sindicalistas están ya al frente y tampoco pagaron con la justicia sus tropelías y mangoneos. Sin embargo en las actuales estructuras de ambos sindicatos no ha cambiado nada. Ni nadie reconoce qué sucedió con los ERE de Andalucía, el mayor golpe institucional de corrupción dado en la democracia española, ni el PSOE ni CC. OO., ni UGT dan una respuesta ni piden perdón. Eso de pedir perdón es para otros…
Sabino Arana (Kirkiño Argitaldaria) de Javier Santamarina. El subtítulo del libro es el siguiente: “Dios, Patria, Fueros y Rey. ¿Un dios o un loco?” y no viene mal, nada mal, que a un partido nacionalista, que se aprovecha de las debilidades del Estado y puritano en la esencia, les recordemos quién fue su fundador. Estos que miran por encima del hombro a quien no es vasco, que se acomodan a las carencias de la moral y/o a la falta de escaños de ciertos partidos constitucionalistas, les vendría bien decirles que cuando se hace política en una única dirección para que unos muevan el árbol y otros recojan las nueces, es corrupción a todos los niveles, y para muestra la vida y la idea de pensamiento de su fundador Arana, racista, machista y homófobo.
Tratado del Hombre (Almuzara) de Heleno Saña Alcón. Magnífico ensayo de este filósofo y antropólogo donde profundiza en las razones del comportamiento del ser humano. Viene bien, después de tener la ocasión de ver cómo se desarrolla el mundo de forma individual o colectiva, conocer las razones que no se ven a simple vista, que subyacen en la persona, pero que son las formas reales de por qué alguien actúa de determinada manera en su vida.