Ya lo dijo el presidente Sánchez en su reciente entrevista con en La Sexta cuando Ferreras le preguntó si después de todo lo vivido durante su legislatura -la pandemia, el volcán de La Palma y ahora la guerra de Ucrania- quiere seguir siendo presindente: "Sin duda... El compromiso político exige lo mejor de nosotros mismos".

Pero Sánchez no es el único político comprometido con sus ciudadanos. Ahí está Inmaculada Colau quien en su día confesó entre lágrimas que se quedaba con su cargo de alcaldesa de Barcelona, porque le podía su sentido del deber. Entonces la edil. hablando sobre la situación política de la ciudad, respondía a una pregunta de su entrevistador sobre si en algún momento le ha pasado por la cabeza decir aquí os quedáis". Es entonces cuando Colau rompe a llorar. "Claro. Claro que lo he pensado", respondía.

"¿Me puedes decir en qué momento?", insistía el periodista. Tardaba en responder la alcaldesa, que no era capaz de contener las lágrimas, hasta que al final consigue decir lo siguiente: "Porque pienso en mis hijos". Acto seguido, se daba paso a publicidad. 

Otro ejemplo, el de Gabriel Rufián quien tiene sobre la mesa la petición de su partido de que se presente a la alcaldía de Santa Coloma de Gramenet. Pero tranquilos, el portavoz de ERC descarta dejar el Congreso ya que, asegura, quiere seguir ayudando en la labor parlamentaria.

Y, por último, Joan Ribó. El alcalde de Valencia admite su desgaste y añade incertidumbre al debate interno sobre los carteles electorales de la coalición. Según El Mundo, mientras crece la preocupación por el horizonte judicial incierto que puede aguardar a la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, Ribó, se resiste a confirmar si repetirá como candidato en las próximas elecciones municipales. 

En una entrevista en À Puntel edil sorprendió a todos apuntando a un "embolado guapo" que le inclinaría a retirarse de la contienda electoral. "La situación de la guerra y de la crisis económica que se nos viene no me estimulan a presentarme porque será un embolado guapo", respondió tajante al ser preguntado por las cuestiones que está valorando y que pesarán en su decisión final. 

"No digo que no me vaya a presentar", matizó Ribó, pero continuó reconociendo que la pandemia ha supuesto un considerable desgaste "a todos los niveles". Es más, a sus 74 años, Ribó es el primero que no oculta que la salud podría impedirle incluso acabar la siguiente legislatura si finalmente repitiese como candidato de Compromís y se hiciese de nuevo con la vara de mando: "No puedo garantizar que vaya a estar los cuatro años". "Tengo claro que, con una edad, la salud no la puedes garantizar", sentenció.

Lo que parece más claro es el apoyo de Ribó al "frente amplio de izquierdas" que quiere impulsar Díaz y que ha encontrado en Valencia el apoyo entusiasta de Oltra. En Més (el antiguo Bloc) hay más reservas al respecto, pero el llamamiento del alcalde a "llegar a acuerdos" es claro: "Todas las fuerzas a la izquierda del PSOE debemos hacer un esfuerzo".