El día 26 de enero se celebra en Madrid un seminario especial que con el nombre Cuidados paliativos y sociales vs. Eutanasia, trata de advertir a la sociedad sobre los peligros que supondría dar carta de legalidad al suicidio asistido y/o la eutanasia, y todo a raíz de la propuesta de ley por parte del grupo parlamentario de Ciudadanos. Una jornada que se celebrará en el Congreso de los Diputados en la sala Ernest Lluch. Organizado por cinco instituciones: Federación Europea One of Us, Political Network for Values, Fundación Valores y Sociedad, Asociación Familia y Dignidad Humana y Fundación Jérôme Lejeune España apuestan por un debate internacional y abierto para que la sociedad conozca las consecuencias de determinadas ideas que se revisten de humanismo sentimentalista sin contar qué hay detrás de leyes así, que sobe todo actúan de pomada pedagógica hasta que se pierda la realidad real de todo aquello que nos afecta a todos, aunque el actor sea otra persona. Los partidarios de la eutanasia justifican como necesaria esta ley en relación con tres principios: La autonomía personal incluye un "derecho a morir", impedir la indignidad y el sufrimiento. Pero cualquier persona con un mínimo de sentido común no puede menos que reírse porque son planteamientos infantiles, que apenas se tienen de pie. Veamos por qué: 1º Nadie tiene derecho a morir, sino derecho a la vida, y el día que ese derecho se conceda, estaremos en manos extrañas que decidirán sobre nuestro futuro más o menos inmediato. 2º Como dijeron taxativamente un Select Committee en 1984 en el Reino Unido tratando este mismo tema: "morir no es sólo un asunto personal o individual". 3º En referencia a la "indignidad" que presuponen los avalistas de la ley, empujados quizá por su relativismo nihilista, habría que recordar, e insistir mucho más, que todo ser humano tiene dignidad por el mero hecho de serlo, por lo que no se necesita que se venda "su eutanasia" como una muerte digna. 4º Matar a una persona, en cualquier caso, no es una respuesta adecuada al sufrimiento. Y no por eso se trata de mantener a una persona con vida a toda costa ("vitalismo"). Por su parte, los que están en contra de segar una vida de forma aséptica y con todas las seguridades (argumentos muy parecidos para exigir el aborto como derecho) hacen acopio de razones que son irrefutables, excepto desde la sinrazón de querer hacer lo que yo quiero sin valorar las consecuencias. 1º Es innecesaria, porque como dicen los ingleses: "los casos difíciles producen malas leyes" 2º Se presiona sobre personas discapacitadas o vulnerables a través de estadísticas de dudoso valor pues la sensación de que estén cocinadas es real, ya que el sesgo parece que les da la razón demasiado pronto. Cuando la realidad es que en contra de la eutanasia predominan los ancianos, los enfermos físicos y mentales, los que sufren dolor… 3º La eutanasia pervierte los principios de la Medicina, ya que el primer principio es actuar para el bien del enfermo. Además, los médicos no pueden inspirar confianza a los pacientes si pueden disponer de sus vidas. Y respecto a la opinión médica, la gran mayoría está en contra por su principio deontológico y el juramento Hipocrático; y, en concreto, los médicos más reticentes son los geriatras y los especialistas en cuidados paliativos. 4º Impulsar una política de salud eficaz de implantación en hospitales públicos y privados de cuidados paliativos, con una alimentación e hidratación adecuada para mantener su estado orgánico lo mejor posible; procurar un acompañamiento familiar y social para su apoyo afectivo y sicológico; y un respaldo social desde los medios de comunicación, el arte, el cine, etc. que suscriba una mentalidad positiva, precisamente por la dignidad de la persona, eso que tanto les preocupa a los que favorecen la eutanasia. Podríamos seguir añadiendo razones pero se haría interminable. Y para eso invito a escuchar este programa, que con motivo de esta Jornada "Cuidados paliativos y sociales vs. Eutanasia" realizamos en SomosLibro el pasado día 23 en el que participan Lourdes Méndez y Nicolás Jouve. Los libros recomendados, curiosamente, son de hace años, porque no he encontrado nada más reciente que trate este asunto. Será por los escalofríos que provoca pensar en lo que pretenden implantar globalmente, una vuelta de tuerca más en la cultura de la muerte. (Nota: le costará encontrar estas publicaciones en las librerías habituales. Pruebe con los enlaces que le propongo o en Amazon). Seducidos por la muerte (Planeta), de Herbert Hendin. Leer este libro es más que suficiente para conocer bien qué sucederá en nuestra sociedad, ya que lo que hace es relatar qué está pasando en Holanda y Bélgica desde la implantación de la eutanasia y el suicidio asistido, que como todas estas leyes a favor de la "libertad" de elección son una trampa en un plano inclinado que es difícil de parar. Eugenesia y eutanasia (Sekotia), de Guillermo Buhigas. Breve libro enciclopédico que hace un recorrido histórico desde los primeros actos eugenésicos de la humanidad hasta la profiláctica muerte asistida que proponen los eutanasistas. También da un repaso a las falsas teorías malthusianas de superpoblación que de alguna forma inspiraron a Darwin y por la que políticos y empresarios neoliberales pensaron que había que deshacerse de excesos de población, pobres claro. Morfina Roja (Libros Libres), de Cristina Losada. Pero si lo que se pregunta usted es cómo empezó toda esta locura, este es el libro que necesita, el libro que relata con claridad cómo el "doctor" Montes se dedicaba por motivos de humanidad a matar enfermos sin permisos ni autorizaciones legales. Esto, por supuesto, se hizo con el beneplácito de José Luis Rodríguez Zapatero y su equipo de gobierno. Absuelto años después de los cargos por una jueza llamada Manuela Carmena. ¡En fin...! Humberto Pérez-Tomé Román @hptr2013
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Cuidados paliativos y sociales vs. Eutanasia
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