En Hispanidad les contamos cómo cinco atletas femeninas de secundaria se negaron a competir en lanzamiento de peso contra un trans.
El caso lo destapó Riley Gaines, ex nadadora All-American y activista de la defensa del deporte femenino. Gaines publicó en X el vídeo en el que se veía a las cinco atletas del equipo de atletismo femenino de la Bridgeport Middle School saliendo de la pista tras negarse a participar. En la grabación se ve como las chicas suben con la bola y se colocan en el círculo de tiro, pero ninguna lanza, todas se salen y abandonan la prueba.
Después de esta decisión, las cinco chicas fueron excluidas de futuras competiciones. Lo que llevó al Fiscal General de Virginia Occidental, Patrick Morrisey, a presentar una demanda contra la Junta de Educación del Condado de Harrison en nombre de las estudiantes y a solicitar a la Corte Suprema que se pronuncie sobre las prohibiciones de estudiantes-atletas trans.
Pero las acusaciones contra la atleta trans Pepper-Jackson han ido a más. Así, una corredora del instituto de Bridgeport, Virginia Occidental, se ha sumado a una demanda judicial. La estudiante, Adaleia Cross alega que su compañero Pepper-Jackson hizo varios comentarios sexualmente abusivos y vulgares sobre ella, lo que le causó una “profunda angustia”.
Becky Pepper-Jackson, 13, is alleged to have told at least one girl: "I’m gonna stick my d*ck into your p*ssy."
— Riley Gaines (@Riley_Gaines_) May 11, 2024
It's tragic to think what he has endured to think this way. Makes you wonder 🚩🚩🚩 https://t.co/GFcWMY6dUW pic.twitter.com/GtpS3vHQfg
Al parecer profirió “varios comentarios sexuales ofensivos e inapropiados”, algo que se hizo más habitual el último año de secundario cuando “los comentarios se volvieron mucho más agresivos, viles y perturbadores”.
La demanda alega que le decía frases como “chúpame la polla” tanto a la denunciante como a otras chicas del equipo. "Hizo otros comentarios sexuales más explícitos que me parecieron amenazadores. A veces, me decía en voz baja: ‘Voy a meterte la polla en el coño’, y en ocasiones también “y en el culo”. Estos comentarios eran perturbadores y me causaron una profunda angustia”.
Todo esto ocurrió cuando Pepper-Jackson compartía vestuario con el resto de chicas y durante los entrenamientos. Cross asegura haber sentido “especialmente confundida, porque me dijeron que B.P.J. estaba en el equipo femenino porque B.P.J. se identificaba como niña, pero las chicas del equipo nunca hablaban así”.
Crodd lo puso en conocimiento del entrenados y los administradores de la escuela, pero "nada cambió".