Conste que no es por molestar pero Israel, abanderado de la tercera dosis, es uno de los países en que más se disparan los contagios y que ya cuenta con casos de muertos, incluso tras recibir la triple pauta.
Y luego está la coña de la meme adjunta, que tiene más razón que un santo… ¡aunque proviene de las redes sociales!
Pero ya he comentado en Hispanidad que los tragacionistas, quienes, como su mismo nombre indica, tienen unas tragaderas enormes, aquellos que tragan con todo, operan bajo el principio de “cara, yo gano; cruz, tú pierdes”. Es decir, que si la tercera dosis no basta, nadie pondrá en duda a los laboratorios farmacéuticos que se están forrando con las vacunas, ni a las autoridades sanitarias que mienten a la gente una y otra vez. Nos dirán que hace falta una cuarta dosis y luego, imagino, que nos vacunemos todas las semanas.
Otra vez: Israel, abanderado de la III fase, ya cuenta con muertos que han recibido la tercera dosis.
Este es un bicho sospechosamente extraño. Cuando sepamos su origen nos explicaremos muchas de las cosas que están pasando
Esto no implica que las vacunas no ayuden. Lo que significa son dos cosas:
1.Que aunque constituyan un avance científico-maravilloso, resulta que la ciencia también se equivoca e incluso, lamento la blasfemia, puede tener fallos, parciales y hasta totales.
2.Que este es un bicho sospechosamente extraño. Cuando sepamos su origen nos explicaremos muchas de las cosas que están pasando. Por ejemplo, la tardanza en actuar contra el covid de nuestro sistema inmunológico.
Por lo menos, acéptenme esto: yo no digo que las vacunas no funcionen. Digo que se nos han vendido como que funcionan al 100 por 100 y no es verdad. La verdad es que toda la humanidad está sirviendo de conejillo de indias para dos instituciones: a beneficio de las grandes farmacéuticas y a beneficio de un tiranía sanitaria con visos de globalidad. Para ser exactos, el Covid constituye el estreno de ese nuevo gobierno mundial, objetivo principal del movimiento globalista en general y del Nuevo Orden Mundial (NOM) en particular.
Dicho esto, a lo mejor hay que seguir vacunando... previa obligación a los laboratorios de que no utilicen cultivos celulares procedentes de fetos abortados. Pero oiga, un poquito más de humildad, ¡oh sublime pensamiento dominante!