Exageración, es la palabra clave del Covid. De hecho, habrá que preguntarse: ¿es tan grave esta pandemia? Ver el cuadro adjunto.

La exageración es total y parcial. Ahora Alemania se ha convertido en el ejemplo de coco malo. Y eso les resulta preocupante a los heraldos del miedo. Porque claro, Alemania se ha vacunado -en un 70%- es un país moderno, europeo, nada conspiranoide. La repera. Pues bien, si comparan el cuadro de infección en Alemania (curva superior del cuadro) con el de otros países del Tercer Mundo, como la India, menos vacunados -un 30%- y con sanidad menos avanzada (curva inferior del cuadro)... resulta que es muy similar. 

Y luego está lo del alguacil alguacilado: vean lo que le suelta una experta en la OMS sobre el chiringuito de Tedros Adhanom, principal exportador de la histeria mundial.  

Y eso que los políticos se basan en la ciencia y sólo en la ciencia. Con ello, no curan el Covid, que aún no sabemos cómo se cura, pero estamos ante el llamado científico cauteloso de la viñeta: el experto que nos explica pero nunca lo que va a pasar o cómo debemos actuar cuando pase.

Hablando de ciencia. Hoy celebramos el día Mundial contra el Sida. También en el sida, los tratamientos llegaron antes que la vacuna. Y eso es lo extraño del Covid: que la vacuna, o así, ha llegado antes que el tratamiento curativo. 

También en el sida, los tratamientos llegaron antes que la vacuna. Y eso es lo extraño del Covid: que la vacuna, o así, ha llegado antes que el tratamiento curativo. A ver si resulta que no es una vacuna

A lo mejor la solución es la de la foto: aislar a la clase política en una balsa.Por lo menos hasta el 27 de enero, para que no nos amarguen la Navidad.

Posdata: y esto no tiene ninguna gracia: Bruselas, Madrid aplaude, quiere vacunar a todos los niños.