Es Abogados Cristianos el que ha hablado con Olga, médico que durante años trabajó en el centro Policlínica Litoral de Granada. Arrepentida por las atrocidades en las que allí participaba, ahora da la cara y cuenta con detalle los horrores y las negligencias que el centro abortista comete.
Es frecuente que se hable de las secuelas que deja el aborto en las mujeres que acaban con la vida de su hijo. Sin embargo, son menos los testimonios que nos llegan de médicos tras haber participado en estos crímenes.
Abortos por aspiración practicados a mujeres que no estaban embarazadas para cobrarles el servicio, una auxiliar de enfermería que suministraba un fármaco que sólo puede administrar un médico o cobros en metálico y eliminación de historiales clínicos para facilitar el anonimato de las mujeres. Estos son sólo algunas de las irregularidades que narra Olga.
Según detalla Abogados Cristianos, el centro es propiedad de Germán Saénz de Santamaría, médico abortista condenado a prisión en varias ocasiones.
Estas negligencias ponen en riesgo a las pacientes, y, sin embargo, el centro sigue abierto, el proceso ya está judicializado, y pronto aseguran que darán más detalles. Mientras ese momento llega piden el cierre del centro, por eso lanzan esta campaña para que Catalina García, Consejera de Salud y Consumo en Andalucía, cierre el centro de abortos Policlínica Litoral por incurrir en numerosas irregularidades. Aunque está por ver que a la abortista Catalina le interese el asunto.