El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, ha acudido este lunes al Congreso para dar cuenta de su ‘Comisión de la verdad’, es decir, del montaje que ha hecho junto con el Gobierno para 'investigar' los abusos sexuales en el seno de la Iglesia y poder 'fusilar', condenar y criticar al clero y a todo lo que huela a cristiano, que es lo que mejor sabe hacer este Gobierno. Recordemos que esta comisión salía adelante con el apoyo de ERC, Bildu, Unidas Podemos, y el Partido Popular. Sólo Vox ha tomado postura en contra de esta monumental hipocresía.
Por supuesto, Gabilondo ha dicho que las víctimas merecen la verdad, la justicia y la reparación, por eso las víctimas participarán porque "sólo a través de sus testimonios se puede conocer lo sucedido". Con este fin, y no el de montar un circo, el Defensor ha informado de que, además de la Comisión asesora, formada por 17 expertos, se formará un foro de diálogo con asociaciones de víctimas y una unidad técnica para escuchar los testimonios.
Para Gabilondo la Iglesia no puede mirar para otro lado ya que "Los abusos se dan en varios contextos, pero la Iglesia es uno significativo por el sentido y carácter de la institución"
Los expertos trabajarán "con discreción" y escucha activa y elaborará un informe que recogerá las aportaciones de las víctimas, que podrán participar presencialmente, por teléfono, correo ordinario o cuestionario online.
Gabilondo aclara que "no se trata de llevar a cabo venganzas o revanchas", sino de investigar lo sucedido y situar a las víctimas en el eje de su actuación. No tenemos dudas, ni de que no es venganza ni revancha, ni de que se investigará la autenticidad de los testimonios.
El Defensor, en una muestra más de que esto no va de venganza, ha aprovechado para contar que en conversaciones con el el presidente y secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), estos desestimaron formar parte de la comisión asesora, "aunque eso no supondría dejar de colaborar, siempre dentro de la ley".
Para Gabilondo la Iglesia no puede mirar para otro lado ya que "Los abusos se dan en varios contextos, pero la Iglesia es uno significativo por el sentido y carácter de la institución".
Porque claro, no es suficiente con las más de 200 oficinas que ha abierto la Iglesia para la recepción de denuncias de abusos cometidos en el pasado, además del establecimiento de protocolos de actuación, y formación para la protección de menores y la prevención de abusos.
Recordemos que se han recibido 506 denuncias de abusos a menores en la Iglesia referidos a los últimos 80 años, de las cuales 103 se refieren a personas de las que consta que ya han fallecido, y más de 300 denuncias que se refieren a casos que estarían prescritos civil y canónicamente.
No basta con esto, hay que obligar a los obispos a pasar por un circo a costa de la pederastia, hay que llevar a cabo la matanza civil de la Iglesia, y es que con todo esto no se busca reparar a las víctimas, sino desacreditar a la Iglesia. Y da igual que la pederastia clerical suponga un 0,2% de la pederastia total. ¿Entonces?