El Gobierno de El Salvador ha adelantado el estreno de la película Sound of Freedom (Sonido de libertad), que denuncia las redes de pederastas que trafican con niños, como si fueran ganado, con fines sexuales y después para vender sus órganos. 

 

En concreto el Ministerio de Cultura del Gobierno que preside Nayib Bukele hizo el anuncio por la red social Twitter: “Te invitamos al estreno en El Salvador de la esperada película ‘Sonido de libertad (Sound of Freedom)’, este 28 de julio, a las 5:30 p.m.”.

Para asistir a la película es necesario hacer una reserva, que es gratuita, a través del siguiente enlace: https://www.cultura.gob.sv/event/proyeccion-de-pelicula-sound-of-freedom/.

De esta manera, el país centroamericano se adelanta casi un mes a otros países de Hispanoamérica, como México, Colombia, Perú, Chile, Ecuador y Bolivia, donde la película producida por el productor mexicano Eduardo Verástegui podrá verse desde el 31 de agosto.

La película -dirigida por Alejandro Gómez Monteverde y protagonizada por Jim Caviezel- ya ha superado los 100 millones de dólares de recaudación sólo en Estados Unidos y a tan sólo tres semanas de su estreno, el pasado 4 de julio. 

La cinta narra la historia del agente de seguridad estadounidense Tim Ballard, quien, después de rescatar a un niño de las garras de los traficantes, se entera de que la hermana del pequeño aún está cautiva. Entonces renuncia a su trabajo y arriesga su vida mientras se embarca en un peligroso viaje a través de la selva colombiana para salvarla.

Y es que el tema interesa. Porque supone sacar a la luz un entramado de perversión que siempre ha tratado de permanecer oculto. Pero esta cinta lo denuncia y lo saca al primer plano. 

Ambos -Verástegui y Caviezel- fueron entrevistados por el politólogo Agustín Laje. Para Caviezel, el tráfico de niños “es un imperio corrupto que está siendo derribado nada menos que por Dios Todopoderoso y la Virgen de Guadalupe, porque la Virgen protege a su Hijo y a todos sus hijos, que han sido asesinados, masacrados”. “Y ahora la mano de Dios se mueve a gran velocidad, como una gran luz y con la gente que ya no tiene miedo”.