Publicábamos en Hispanidad un policía local de Guardamar del Segura (Alicante) denunciaba que, con la acogida de menas en un hotel de la localidad “se están produciendo agresiones y violaciones, han alterado el orden social”. El agente responsabilizaba al alcalde socialista: “No está velando por nuestra seguridad”. Los vecinos señalan que los senegaleses que llegaron se integraron bien, pero que después se acogió a marroquíes y argelinos, que desataron un auténtico caos.

Mientras, el edil socialista respondía así a la denuncia de los policías locales:

Y, en la calle, los vecinos, representados por esta joven, narra cuál es su día a día desde que estos inmigrantes llegaron a su localidad: