Si quieren pueden leerse el Informe entero. Todo depende de su nivel de sadomasoquismo. Se trata de la nueva edición del grupo de trabajo IPPC de Naciones Unidas, todos ellos naturalmente, científicos y expertos de elevado ringorrango.
Se lo resumo: la cosa va mal, va peor El cambio climático se acentúa y eso, se lo aseguro, no es bueno.
La ONU, siempre alegre, nos advierte de inundaciones y sequías, temperaturas insoportables, hambre y sed… y nos cita con la catástrofe a corto plazo. Lleva haciéndolo desde hace décadas pero señores, el tiempo se acaba… como se acababa ayer. La verdad es que si hubieran fotocopiado el anterior informe sobre cambio climático, se habrían cansado menos.
Además, estos asuntillos ligeramente apocalípticos se prolongarán durante los próximos milenios. Y entonces, ¿no sería mejor prepararnos para la insoslayable extinción? Cruzarnos de brazos, en lugar de poner en práctica la vuelta a la caverna, al menos para los pobres, que propone el Nuevo Orden Mundial (NOM), concretado en su amanuense, Naciones Unidas.
Además, estos asuntillos se prolongarán durante los próximos milenios. Y entonces, ¿no sería mejor prepararnos para la insoslayable extinción?
Para el NOM, el hombre puede seguir siendo el rey de la Creación, ciertamente, pero para ello tendrá que flagelarse, digamos para mantener el cargo. Al menos, mientras no se consiga una exterminación rápida e indolora. Estamos en ello.
Naturalmente, la sobrepoblación es la principal causa del desastre telúrico que nos espera. Como reducir la población presente está mal visto, reduzcamos la futura, ya desde el vientre materno.
Y llegamos al asunto más querido por la ONU. Vale estamos en situación crítica por cambio climático. Como no podemos cambiar la órbita del planeta, esto es, como no tenemos soluciones, busquemos culpables. No sirve para nada pero siempre relaja. Además, resulta más sencillo.
Pues bien, Naciones Unidas ha concluido -otra vez- que el culpable del desastre climático es el hombre. Entonces sí que no se lo esperaban, ¿a que no? La conclusión de la ONU es que el culpable de que aumente la temperatura (¡Qué calor!) y de todo lo que nos pasa es el hombre. No el perro, ni la rata, ni las cortezas de alcornoque: el hombre. Bueno, las expertas de Podemos, pongamos Ione Belarra o Irene Montero, consideran que tiene mucho más culpa el hombre que la mujer. Sobre todo, el heterosexual. Pero, reconozcámoslo: esto último no figura en el Informe ONU.
Para el NOM, el hombre puede seguir siendo el rey de la Creación, pero tendrá que flagelarse para mantener el cargo. Al menos mientras no se consiga una exterminación rápida e indolora
Es como cuando hay un accidente de aviación. Se nos cuenta la tautología de que se debió a un “fallo humano”. Y es cuando te das cuenta de que todo fallo es humano porque resulta que la persona es el único animal racional, el único, por tanto, que posee culpa y mérito, pues te quedas ‘cabizbundo y meditabajo’. Los animales y las plantas obedecen a su instinto por lo que no merecen ni premio ni castigo. El culpable siempre será el hombre. Naturalmente pero eso no es una noticia, sólo es una obviedad.
En cualquier caso señores, estamos perdidos. Lo que no se entiende es cómo el NOM pretende que volvamos a la caverna por aquello de la ecología y la sostenibilidad si ni aún así nos salvaremos.
Además, si el cambio climático es inexorable, ¿para qué molestarse? Perded toda esperanza. Esperad el diluvio, cómodamente tumbados en la hamaca. No sobrevivirá nadie que pueda castigarte por tu pasividad.
Como guinda, la aportación científica del informe. Ojo al dato: concluye que ha quedado científicamente probado que el hombre es el culpable del cambio climático porque, no hay pruebas científicas “en sentido contrario”. Es decir, como no hay pruebas de que el hombre es inocente... pues resulta que es culpable. Está clarísimo.
Naturalmente, la sobrepoblación es la principal causa del desastre telúrico que nos espera. Como reducir la población está mal visto presente está mal visto, reduzcamos la futura
Es como el chiste del irlandés, a quien un testigo acusa de haberle visto matar a un hombre:
-Señoría, ¿y qué? Yo puedo presentarle a 1.000 testigos que no me vieron apuñalarle.
En cualquier caso recuerden que el hombre no desertiza el planeta. Al revés, lo fertiliza. Y recuerden también que ese calentamiento global (no, el calentamiento mental que esa es patología nacida en la ONU) no es más que el producto de una humanidad que vive mucho mejor que ayer y que anteayer. No vaya a ser -uno es malpensado- que lo que pretenda el Nuevo Orden Mundial sea que los ricos mantengan el nivel de vida actual mientras todos los demás acabamos en la caverna y sin hijos.