Por un lado, el Ministerio de Igualdad encarga la compra de 11.371 pulseras telemáticas destinadas a la protección de las víctimas de violencia de género y violencias sexuales, por un importe de 55 millones y una duración de 30 meses. Por el otro, Igualdad admite, no obstante, que su estimación del número de dispositivos necesarios para proteger a las víctimas puede quedarse corta debido al «repunte en el número de mujeres asesinadas». ¿Influirán acaso en este desequilibrio las excarcelaciones y rebajas de condena del Sólo sí es sí?

 

Tranquilos, todo está controlado, Irene, al estilo ministra coraje, ejercerá su cargo hasta el final. Por eso, ha convocado un comité de crisis en un nuevo intento de frenar una violencia que se ha incrementado durante su mandato, con un aumento de las víctimas de violencia de género un 8% en 2022.

La delegada contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha hecho hincapié en la responsabilidad que tienen ante la violencia de género tanto las diferentes instituciones del Estado como los ciudadanos, y ha recordado que el 016 atiende todas las horas de todos los días, en 53 idiomas: "Todas las víctimas nos enseñan algo, nos permiten mejorar, y queremos dar un mensaje a la sociedad. Las instituciones tienen sus deberes pero la ciudadanía también, demostrando que no hay tolerancia contra cualquier tipo de violencia de género, no sólo la más extrema sino ante cualquier violencia de menor entidad. Si somos intolerantes antes esto las mujeres sabrán que estaremos ahí cuando ellas nos necesiten. Es un problema sistémico y social que va a mejor en el sentido de que cada vez hay menos víctimas asesinadas, cada vez sale más a la luz la violencia machista. Seamos parte de ello y este verano permanezcamos alerta". Sobre todo, porque sigue aplicándose el Sólo sí es sí...