Según fuentes del Departamento de Justicia de la Generalitat, la agresión física a una funcionaria de la prisión Ponent, en Lleida,  estuvo acompañada de comentarios de naturaleza sexual. Ocurrió el viernes 22, cuando los reclusos debían dirigirse a sus celdas para descansar. En ese momento, uno de los presos sujetó a una funcionaria por el brazo y la arrastró hasta su celda. 

Según La Razón, otros empleados de la prisión intervinieron, redujeron al recluso y lograron liberar a la mujer de la celda. Actualmente, el preso está siendo investigado por resistencia a la autoridad y por intento de agresión sexual.

Pero, además, las fuentes del Departamento de Justicia de la Generalitat confirmaron que ese mismo viernes se produjeron otros disturbios en la prisión: una pelea entre dos grupos que acabó con el aislamiento de seis reclusos y, además, otro episodio violento con un preso al que se ingresó en el departamento de régimen cerrado.