Isabel Díaz Ayuso avanza en su 'rebelión' frente a la Lomloe y su lavado de cerebro a los niños. Estos son algunos ejemplos de la 'batalla' que mantiene la CAM frente a la Ley Celáa:
- Cronológicamente, en febrero de 2022, la presidenta madrileña aprobaba la Ley Maestra de Libertad de Elección Educativa de la CAM: 'Sí' a la concertada, 'sí' a libertad de elección de centro escolar y 'sí' a la demanda social. Días después supimos que Ayuso imponía el inglés de 3 a 6 años en los colegios públicos madrileños. Y ahora, en la CAM sí se estudiará el terrorismo de ETA. Recordemos que el currículo de ESO aborda en la asignatura de Valores Cívicos y Éticos y en la de Geografía e Historia el estudio del terrorismo. Sin embargo, tal como recoge ABC, no hay una mención expresa al terrorismo en España, como por ejemplo, al de ETA. De hecho, el Ministerio del Interior, concretamente la Dirección General de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, pidió a Alegría la inclusión del «análisis del terrorismo en España» pero la ministra lo rechazó con la justificación de que está «implícito en el texto del anexo», cosa que no puede desprenderse en ninguna de las dos asignaturas.
-La Comunidad de Madrid apuesta por la libre elección de centro en Madrid a pesar de la Lomloe. El gobierno liderado por Díaz Ayuso contabilizará, además, al concebido no nacido, en el caso de un alumno solicitante que pertenezca a una familia numerosa.
- Los alumnos de bachiller madrileños sí leerán 'El Quijote', 'La Celestina' y el 'Lazarillo'. La estrategia de Ayuso sería que cualquier añadido que introduzca en el currículo complete el del Ejecutivo pero en ningún caso lo contravenga porque ello implicaría ir contra la ley educativa en vigor, la Lomloe, más conocida como 'ley Celaá'.
-El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha suprimido de su currículo de Bachillerato conceptos como «memoria democrática», «roles de género» y «diversidad identitaria» por implicar «una carga ideológica muy importante».
Y es que la presidenta madrileña ha mostrado desde el principio su oposición a distintos aspectos de la Lomloe. Así, Ayuso llegaba a plantearse respecto al aprobado general: "Si el esfuerzo no vale, ¿qué estamos haciendo, fabricar borregos?"
Ahora, da un paso más y recurre ante el Tribunal Supremo el currículo de Bachillerato “por su dañina carga ideológica”. Tal como recoge La Razón, considera que hace “apología de la izquierda” y deja al lado aspectos que Madrid considera esenciales para la educación de los alumnos.
En el Gobierno de Díaz Ayuso creen que «es mucho más formativo que los alumnos aprendan en 2º de Bachillerato la historia de los siglos XVII al XIX y las monarquías correspondientes, como la de los Austrias y la de los Borbones, para comprender mejor la historia contemporánea, que cuestiones más relacionadas con otros ámbitos del currículo tales como «la emergencia climática» o «la pluralidad identitaria» o «actitudes esenciales éticas antes del siglo XX».
Así, ha suprimido todo lo relativo a la perspectiva de género en la que tanto se insiste en el currículo diseñado por Pilar Alegría, como las «fuentes literarias y artísticas en los estudios de género, roles de género», o «estudiar de forma diacrónica el papel que tiene la mujer»... También se elimina todo lo relativo a la memoria histórica y democrática como un reconocimiento a los movimientos en favor de la libertad en la historia contemporánea, lo mismo que lo relativo a las identidades nacionales y regionales como una identidad que «más interés despierta en la actualidad y que más tensión ha provocado en la sociedad española en las últimas décadas».
El recorte -continúa La Razón- alcanza a todo lo relativo al comportamiento ecosocial «como un principio inexcusable de la humanidad, tanto para afrontar la emergencia climática como para alcanzar los niveles mínimos de justicia social». Así quedan borradas del currículo cuestiones como «soluciones coherentes con la ética y el compromiso con la sostenibilidad».