En abril, Vox llevaba a debate en el Pleno del Congreso una reforma del Código Penal para que los agentes puedan desalojar a los “okupas” sin necesidad de una orden judicial. El portavoz del Comité Nacional de Vox, Jorge Buxadé, insistía en la necesidad de que se realice un “desalojo inmediato de los okupas” para no tener que ver “terribles imágenes todas las semanas”.

Además, pedían un endurecimiento de las penas, y proponían penas de prisión de uno a tres años para quienes accedan ilegalmente a una vivienda, de dos a cuatro años si se trata de la vivienda habitual de los propietarios y condenas de cuatro a seis años para quienes lo hagan además con violencia o intimidación. 

Pues bien, ahora es el PP el que registrará una proposición de Ley que pide recuperar el delito de usurpación de inmuebles, con penas de entre tres y cinco años de cárcel. Estas penas se verían agravadas cuando la okupación haya sido realizada por redes de carácter "mafioso".

Según El Español, el PP también quiere facilitar con esta Ley que el desalojo de los okupas pueda llevarse a cabo de forma inmediata, cuando se constate un "delito flagrante", y en todo caso en un plazo máximo de 24 horas.

Por otro lado, la propuesta del PP busca impedir que quienes hayan ocupado ilegalmente un inmueble puedan empadronarse y acceder a cualquier tipo de beneficios otorgados por las Administraciones públicas.

Por último, también otorga a las comunidades de propietarios -que a menudo son las primeras en advertir la okupación de un inmueble- la condición necesaria para iniciar el proceso de denuncia.

Y, es que, más de 120.000 familias y pequeños propietarios se encuentran desprotegidos por la ley actual, al verse despojados de su primera o segunda residencia por okupas, quienes, por otra parte, están cada vez más seguros de sus 'derechos'.