Fundación Madrina denuncia que España está a la cabeza de Europa en “pobreza infantil”, y que la malnutrición “materno-infantil” se está “cronificando”. En este sentido, denuncia que en 2023 vuelve a aumentar la pobreza “materno infantil” y de dificultad de “acceso a la sanidad pública” con menores con más riesgo a padecer patologías al nacer, debido a un crecimiento de madres malnutridas y sin seguimiento ginecológico de mujeres embarazadas.
Además, las familias con un solo salario ya no pueden sobrevivir si presentan menores a cargo. No pueden mantener los gastos de un hogar, ni llegar a fin de mes, por lo que también frecuentan las “colas del hambre” y tienen que elegir entre alimentar a su bebé o pagar el alquiler de la vivienda.
No hay dinero ni comida para los pobres. Ya en este año 2023 se informa que no se repartirán ni cereales, ni leche, ni aceite a las familias vulnerables
La subida del precio de los alimentos básicos y la voluntad política de invisibilizar las “colas del hambre” -denuncia Madrina en su nota de prensa- como “fracaso del sistema social”, provocan que la administración no pague los alimentos de las familias más pobres, en 2023, y condenan a que las familias más vulnerables vuelvan a vivir de la caridad de la sociedad civil en 2024. No hay dinero ni comida para los pobres. Y eso que el Gobierno sociopodemita no se cansa de repetir que piensa siempre en los vulnerables y nadie se quedará atrás. Pues bien, según la Fundación, ya en este año 2023 no se repartirán ni cereales, ni leche, ni aceite a las familias vulnerables.
A partir de diciembre de 2023, se elimina por tanto la cesta de alimentos para familias vulnerables que concede el Ministerio de Agricultura, a través de los fondos europeos FEGA, sustituyéndose supuestamente por una “tarjeta social de alimentos” que darán los Servicios Sociales solo a familias con hijos y en pobreza severa.
Para Madrina otra ha sido la causa de la desaparición de estas ayudas, como la falta de recursos económicos y el deseo de “invisibilizar” las “colas del hambre”, como fracaso visible del sistema de protección social.
La Fundación considera que la nueva “ingeniería social” de las “tarjetas sociales de alimentación”, que se ha comunicado que se implementará en 2024, y que se pondrán en su lugar para la compra de alimentos básicos, no llegará a todos, no ha funcionado. Madrina estima que un 50% de las familias necesitadas se quedarán fuera de las ayudas, por no cumplir con los requisitos y trámites administrativos, y éstas ayudas llegarán con un retraso de hasta 12 meses.
Anualmente, la Fundación cubriría por valor de 3.456 euros a cada familia por menor. Con esta cantidad, la Fundación cubre a día de hoy, tan solo un 50% de este gasto básico importante de las familias
Por su parte, Madrina recuerda que provee de alimentación básica a cada familia por valor de 1.300 euros anuales y por familia. Suponiendo que madrina atiende a 2.234 familias activas anuales, (si bien la base de datos de familias atendidas anualmente es de 7.200 familias). Esto supone grosso modo una entrega de alimentos de adulto a todas las familias que atiende por valor de 1.000.000 de euros anuales. Con esta cantidad, sin embargo, y a día de hoy, la Fundación Madrina cubriría tan solo el 68% de las necesidades óptimas de alimentación de adulto de una familia al año.
Igualmente, la Fundación Madrina entrega alimentación e higiene infantil a cada familia que acoge, por valor de 288 euros al mes, es decir, anualmente, la Fundación cubriría por valor de 3.456 euros a cada familia por menor. Con esta cantidad, la Fundación cubre a día de hoy, tan solo un 50% de este gasto básico importante de las familias.
Estimación de gastos de alimentación por familia, según el Ministerio de Agricultura, si bien para Fundación Madrina las cifras se han quedado obsoletas, al no estar actualizadas por el aumento de precios.