Siete personas con los rostros ocultos tras caretas blancas, vestidos con buzos blancos, entraron el pasado domingo en la parroquia de Zestoa, en plena misa. Cuando se encontraban en el altar desplegaron una pancarta en la que se acusaban a la Iglesia de avariciosa (“diruzale”) y especuladora (“espekulatzaile”).
Estos 'amables' muchachos se manifestaban por una 'noble causa', y es que otros compis suyos tienen okupado un local propiedad de la Iglesia. Pertenecen a Zestoako Gazte Asanblada y tienen un conflicto abierto con la Diócesis de Gipuzkoa por el gaztetxe, ubicado en Elizondo, un edificio adosado a la iglesia de la localidad guipuzcoana, que pertenece a la iglesia guipuzcoana y que fue okupado por jóvenes del grupo mencionado. La cuestión es que la 'pérfida' Diócesis presentó una denuncia de desalojo y a los muchachos no les ha hecho ninguna gracia. Claro, quieren seguir viviendo de gorra, por lo que irrumpieron en misa, desplegaron su pancarta y arrojaron billetes falsos a las personas presentes en la iglesia.
Abogados Cristianos ha denunciado a la Asamblea Juvenil de Zestoa por estos hechos, por posibles delitos de interrupción de culto, profanación, incitación al odio y manifestación ilícita. No descartan además que los miembros de la asociación puedan estar incurriendo además en un delito de coacciones.
La presidente de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, señala que “ninguna protesta puede justificar estas acciones que atacan directamente al derecho fundamental a la libertad religiosa. Llegaremos hasta el final para evitar que estos hechos queden impunes”.
El PNV de Zestoa ha hecho público un comunicado en el que condena los hechos y denuncia el clima de "intimidación" hacia la gente del pueblo, además de los daños ocasionados en los templos del municipio y los barrios vecinos: "El PNV quiere solidarizarse con las personas que han sufrido estos comportamientos injustos. No vamos a tolerar este tipo de conductas".
Además, afean la postura del alcalde Mikel Arregi, de EH Bildu: "No se puede decir sí a una parte y dar la razón a la otra. Su actitud y la de EH Bildu da alas a los responsable de la ocupación".