Comenzamos esta crónica semanal sobre cristianos perseguidos en Pakistán, donde falleció esta semana Nazir Masih, un cristiano de 72 años que fue atacado brutalmente por islamistas radicales, el 25 de mayo, en Sargodha, acusado de falsa blasfemia contra el Corán.

Nazir Masih murió a causa de las graves heridas, algunas de ellas en la cabeza.  El abogado católico Khali Tahir Sandhu, senador del Punjab y ministro de Derechos Humanos del gobierno provincial, comentó a la Agencia Fides: «La comunidad cristiana y otras minorías religiosas se preguntan cuándo cesará tal brutalidad en Pakistán. Imploramos justicia y paz y permanecemos unidos en la condena de toda forma de violencia y discriminación. Esperamos que todas las personas de buena voluntad se unan a nosotros y nos apoyen para exigir justicia para las víctimas y hacer de este caso un ejemplo para castigar a los autores y detener a los extremistas».

Al menos, este linchamiento dio lugar a una serie de protestas en el propio Pakistán y en otros países, principalmente porque la acusación de blasfemia resultó ser falsa.

(Cristianos perseguidos en Mozambique, foto ACN)

Nuestro siguiente destino es Mozambique, donde extremistas islámicos vinculados al Estado Islámico están intensificado los ataques en las provincias de Cabo Delgado y Nampula.

Esos ataques tienen como objetivo las aldeas (como Siriba, Mopanha, Nanua o Nassua) y dentro de estas, las escuelas y las iglesias, que son quemadas y profanadas por estos extremistas musulmanes. Muchas casas de cristianos también han sido atacadas y muchos de ellos han tenido que esconderse.

En palabras de Jo Newhouse, colaboradora de Puertas Abiertas en el África Subsahariana, las «zonas del norte de Mozambique podrían quedarse sin ninguna presencia cristiana». Hay que tener en cuenta que los cristianos constituyen el 56% del total de la población del país.

(Cristianos perseguidos en China, Foto de ACN)

En China, prosigue la represión contra los católicos que son objetores de conciencia y que rechazan unirse a la Iglesia Patriótica (la consentida por la dictadura comunista).

Según informa la publicación Bitter Winter, la dictadura comunista se dedica a apresar a los objetores de conciencia católicos.

No solo eso: entidades defensoras de los derechos humanos han denunciado que dos líderes católico objetores de conciencia —el padre Chi Huitian y el profesor Chen Hekun— desaparecieron misteriosamente en el mes de abril y todavía no se sabe nada de ellos. Mientras que otros objetores de conciencia católicos encarcelados fueron sometidos a un duro adoctrinamiento en la cárcel.

Urgen oraciones por los cristianos perseguidos por su fe en Cristo.