Tras un mes ingresado, el jueves 29 falleció Edson Arantes do Nascimento (Pelé), a los 82 años de edad. No vamos a hablar de sus cualidades futbolísticas -otro muchos lo han hecho y maravillosamente bien-, sino de aspectos tal vez menos conocidos.

Por ejemplo, su humildad, al menos para reconocer que su gran habilidad con el balón venía de lo alto: “Dios me ha dado el don de saber jugar al fútbol, porque realmente es un don de Dios y mi padre me ha enseñado a usarlo”, afirmó en una entrevista en L’Osservatore Romano, recogida por Religión en Libertad. Pelé también se consideraba un hombre “muy afortunado” porque pudo entrevistarse y recibir la bendición de tres papas: Pablo VI, San Juan Pablo II y Benedicto XVI.

El considerado por muchos el mejor futbolista de la historia, que solo jugó en dos equipos, el Santos y el Cosmos (EEUU), veía con recelo la evolución del fútbol profesional. “Hoy un jugador, desde muy joven empieza a jugar pensando cuánto dinero podrá ganar. No le importa dónde va a jugar. Un jugador va al Real Madrid y besa la camiseta. Al día siguiente cambia de equipo y besa la nueva camiseta jurando amor eterno”, afirmó en alusión al fichaje de Cristiano Ronaldo por el club blanco. Y es que para él, las nuevas figuras “aman solo al que les paga más y esto es peligroso para el futuro del deporte”, concluyó.

Pelé siempre quiso mantenerse al margen de la política y nunca daba su opinión personal sobre tal o cual partido. Hasta que el 7 de noviembre de 1989, víspera de las elecciones generales, y en una rueda de prensa para presentar un proyecto empresarial, se declaró socialista, recoge Brasil de Fato. “Si soy candidato, intentaré hacer un plan por adelantado y participar en los debates por televisión”, afirmó.

No fue candidato, pero sí ministro de Deporte en 1994 durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso (PSDB). Estuvo cuatro años.

Su cercanía al socialismo, al menos al socialismo como él lo entendió, no impidió que en 2020 le regalara una camiseta firmada a Bolsonaro, con motivo del Día Nacional de la Conciencia Negra, en Brasil. “Al presidente Bolsonaro, con un abrazo, Edson Pelé”, firmó. “Gracias Pelé. Buen dá a todos”, contestó el entonces presidente en sus redes sociales.

Descanse en paz.