El pasado diciembre, el Parlamento portugués aprobó la ley de eutanasia por tercera vez.
Sin embargo, el pasado miércoles 4 de enero, el presidente de Portugal, el católico Marcelo Rebelo de Sousa, volvió a bloquear por tercera vez la ley de eutanasia, como recogió Hispanidad. En esta última ocasión, Rebelo de Sousa lo hizo enviando la ley al Tribunal Constitucional, que deberá pronunciarse por segunda vez acerca de si el nuevo texto respeta la Carta Magna.
En 2021 el Tribunal Constitucional dictaminó que la eutanasia puede ser constitucional en ciertas condiciones, por 7 votos contra 5. Pero la ley no salió adelante.
Pues bien: en esta ocasión, la respuesta del Tribunal Constitucional de Portugal al presidente ha sido fallar este lunes 30 de enero en contra de una nueva versión --la tercera-- de la ley de eutanasia en una estrecha votación de siete jueces contra seis. El Tribunal Constitucional (TC) de Portugal considera que algunos puntos de la norma entran en conflicto con la Carta Magna.
El presidente del Constitucional, João Caupers, manifestó sus dudas sobre las imprecisiones del concepto de sufrimiento de gran intensidad: «El tribunal ha entendido que el legislador, incluso después de haber desarrollado esfuerzos para aclarar algunos conceptos utilizados en la versión anterior, optó por ir más allá, alterando algunos aspectos esenciales».
Lo cierto es que es la segunda vez que el TC de Portugal anula una ley de eutanasia por falta de precisión en sus términos. La nueva norma, tras volver a ser vetada por el presidente, volverá al legislativo.
En España, en junio de 2021, Vox presentó un recurso ante el TC contra la ley de Eutanasia para defender la vida de las personas "hasta la muerte natural". Será uno de los recursos que tenga que resolver el nuevo TC, de mayoría progresista.