Hasta ahora, la Real Academia Española (RAE) se había dedicado a incluir términos nuevos en el diccionario según se iban incorporando al léxico utilizado por la población. En esta ocasión, año 2023, la institución ha dado un paso más y ha incluido, no un término, sino un concepto: ‘no binario’.

De esta manera, a las dos acepciones tradicionales de binario,

-Compuesto de dos elementos, unidades y guarismos.

-Dicho de un sistema de numeración: de base dos.

El sistema binario utiliza como cifras exclusivamente el 0 y el 1, hay que añadir ahora la de no binario: dicho de una persona: que no percibe su identidad de género en términos binarios de hombre o mujer.

En otras palabras, la RAE se ha vuelto Woke y al admitir el concepto no binario abre la puerta a tener que incluir todas las variantes de género, que son muchas, con tendencia al infinito. No hay que más que fijarse en los 112 géneros no binarios que definió Vitit Muntarbhorn, el primer Defensor Global LGBT de la ONU. Por cierto, por algún motivo que desconocemos, el trabajo de Muntarbhorn en el que hablaba de los 112 géneros ha desaparecido de la red. ¡Qué raro!

Relacionado

Entre las múltiples palabras admitidas, la RAE ha incluido ‘machirulo’ -dicho de una persona, especialmente de un hombre: que exhibe una actitud machista- y disforia de género: “Angustia o malestar persistente en una persona causados por la falta de correspondencia entre su sexo biológico y su identidad de género”.

Más palabras: perreo, chundachunda, VAR (videoarbitraje), balconing, aquaplanning, banner, alien, oscarizar, supervillano, pobreza energética, cookie, big data o sihogarismo, para designar a las personas sin hogar.

En definitiva, la RAE se ha vuelto Woke. Esto marcha.