Corre por Internet y no sé quién es el autor de esta joyita de vídeo, cortísimo de duración pero intenso de contenido. Realizado por un católico, desde luego, pues no tiene miedo a romper con ese pacifismo comodón, siempre dispuesto a permitir que la injusticia campe a sus anchas porque combatirla resultaría un antidemocrático belicismo. Este vídeo corto me parece un buen resumen de la batalla de nuestros días y hasta del sentido del universo… siempre según la vieja máxima de los requetés durante la Guerra Civil: “Disparad pero sin ira”

Porque la guerra actual es entre Satanás y la Cristiandad, entre el mundo y el Cuerpo Místico de Cristo

Sí, todas las guerras son guerras de religión pero esta es la batalla de la religión, por tanto, de la vida.   

Si no tenemos esta idea clara mucho me temo que andaremos despistados por la existencia. Andaremos, sobre todo, enredados en batallas falsas que no merece la pena librar, ya sea entre izquierda y derecha o entre alguna de las muchas batallas falsas donde los contendientes no encuentran sentido ni a sus argumentos ni a los del presunto adversario. No podemos sustituir el ansia de Cristo, el que sacia sin saciar, el que nunca cansa, ni por la igualdad de la mujer, la ideología de género, la religión climática, el trashumanismo o cualquiera de las muchas barbaridades con las que se pretende dar sentido a la vida del hombre, cuando no hacen otra cosa que arrebatarle la vida.

Sólo Dios puede llenar una vida pero el amor de Dios es exigente. Exige nada menos que la vida.