Mientras en los centros de extranjería este vigilante de seguridad "ve de todo", desde que los internos se maten entre sí, hasta que vuelvan al centro "pasadísimos o habiendo cometido delitos", la población, dice, "vivimos enajenados, en una falsa sensación de comodidad, de está todo bien, de España va bien". Además, opina que si los medios de comunicación difundieran lo que ocurre realmente, las cosas cambiarían mucho:

Todo esto, a la vez que Pedro Sánchez se rasgaba las vestiduras, ayer mismo, miércoles 31 de julio, en su rueda de prensa de fin de curso, repitiendo que la inmigración ilegal no está relacionada con la delincuencia.