Laurent Paillassot ha convertido la filial española de Orange en un problema
El CEO de Orange España, Laurent Paillassot, cree que un proceso de consolidación en el sector sería positivo. Es justo lo contrario de lo que opina José María Marín Quemada. El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) está empeñado que en que haya cuatro operadores de ámbito nacional para preservar la competencia en el mercado.
“Nos gustaría que hubiera menos operadores porque con tres compañías ya es suficiente para que exista una fuerte competencia”, señaló Paillassot este jueves, durante la presentación de resultados del tercer trimestre. Don Laurent, no espere más y, después de convencer a Marín Quemada, cómprele MásMóvil a John Hahn, responsable del fondo Providence, su máximo accionista, que está deseando vender. Todos ganan. Eso sí, vaya preparando la cartera, que el bueno de Hahn no regala nada.
Miren por dónde, los ingresos de Orange España apenas crecieron un 0,5% durante el tercer trimestre a pesar de aumentar en 13.000 los clientes de banda ancha fija, y en 46.000 los usuarios de televisión. Todo gracias al fútbol, por cierto. Ahora bien, el aumento de clientes no se ha traducido en ingresos, según la compañía, por la guerra de precios desatada en agosto y septiembre.
Cuanto más crece el cuarto operador, más grande es la factura que debe abonar a Orange
Así las cosas, el tenue aumento de la facturación se debió al negocio mayorista, esto es, al acuerdo que mantiene con MásMóvil. Cuanto más crece el cuarto operador, más grande es la factura que debe abonar a Orange. Y la teleco que dirige Meinrad Spenger sigue aumentando su base de clientes, aunque cada vez de una manera más lenta.