El caos podemita: los que no piden el Ingreso mínimo vital lo cobran. Los que lo piden, no. muchos de los errores que se cometen al distribuir las ayudas suceden porque la Seguridad Social lo concede basándose en datos antiguos
La Asociación Víctimas del Paro está recibiendo mensajes de personas beneficiarias del Ingreso Mínimo Vital (IMV) que no lo han solicitado, porque cuentan con suficientes ingresos para no percibirlo. “En las últimas semanas hemos tenido conocimiento que se está concediendo de oficio el IMV a algunas personas que están cobrando la prestación por hijo a cargo (conocida popularmente como “los puntos”) y que no lo habían solicitado en ningún momento”, explican desde la Asociación.
Estos beneficiarios están comunicando a través de redes sociales su situación e incluso han intentado ponerse en contacto con la Seguridad Social para renunciar al Ingreso Mínimo Vital y “no saben cómo hacerlo”, explica el presidente de la Asociación Víctimas del Paro, Joaquín García.
Y con los Ertes, más de lo mismo. Personas que ya se han incorporado a sus puestos de trabajo, siguen persiguiendo la prestación, mientras que otros muchos que siguen sin volver a trabajar, todavía no la han recibido.
Es el caos podemita del prometer y prometer ayudas y luego no gestionarlas correctamente, malgastando los recursos sin que lleguen a quienes realmente lo necesitan.
Pero, no nos olvidemos de la Seguridad Social del ministro Escrivá, porque muchos de los errores que se cometen al distribuir las ayudas suceden porque la Seguridad Social lo concede basándose en datos antiguos.
Escrivá e Iglesias... ¡gran trabajo!