Maurici Lucena apuesta por el negocio exterior, que llevaba parado los últimos tres años.
AENA ha dado un buen recibimiento a su nuevo presidente, Maurici Lucena, con sus resultados del primer semestre. Más ganancias e ingresos, gracias al aumento del tráfico de pasajeros. Además, habrá más premios para los accionistas, vía dividendo.
El nuevo presidente del gestor aeroportuario lleva apenas nueve días en el cargo, un nombramiento con el que Pedro Sánchez ha agradecido el apoyo del PSC. Sin embargo, parece que habrá pocos cambios respecto a su antecesor, el popular Jaime García-Legaz, fundamentalmente por dos razones:
- El Estado seguirá siendo el dueño del 51%. Es decir, no habrá más privatización
- Repartirá el 80% del beneficio obtenido vía dividendos en el periodo 2018-2020, tal y como ha aprobado recientemente el Consejo de Administración. Es el mismo porcentaje que se distribuyó en 2017 y que supuso 6,5 euros brutos por acción, un 69,7% superior al del año anterior (3,83 euros)
Vayamos a los resultados, en línea con los esperados por los analistas de Bankinter. AENA ha ganado 514,5 millones de euros entre enero y junio, un 11,6% más que hace un año. Por su parte, el Ebitda ha aumentado un 6,8%, hasta los 1.126,5 millones y el Ebit, un 10,3%, hasta los 724,9 millones.
Los ingresos ascienden a 1.965 millones, destacando las tasas de las aerolíneas (1.273 millones) y los comerciales (519,1 millones)
Los ingresos han ascendido a 1.965 millones (+5,6%). Entre ellos: 1.273 millones de ingresos aeronáuticos -su principal negocio-, que han aumentado un 4,6%; 519,1 millones de ingresos comerciales (+8,8%); 111,5 millones (+8,1%) procedentes de la actividad internacional -de los que 106,3 millones son del aeropuerto londinense de Luton- y 33,2 millones (+13,4%) de servicios inmobiliarios.
La cifra de pasajeros se ha incrementado un 6,8%, hasta los 121,1 millones, y al incluir el aeropuerto de Luton, el total es de 128,8 millones (+6,5%). Sin embargo, representa una desaceleración respecto al aumento del 9,2% logrado en el primer trimestre. La contención de costes ha crecido un 4,8%, permitiendo que el margen Ebitda mejore al 57,3%, pero los analistas de Bankinter prevén un ligero deterioro de este último a medida que se vaya ralentizando el crecimiento del tráfico.
Respecto a la deuda financiera neta, hay que hablar de un aumento desde los 7.156 millones de finales de 2017 a 7.441,3 millones. Eso sí, la buena noticia es que sigue manteniendo el ratio de 2,8 veces el Ebitda.