Paolo Vasile es CEO de Mediaset España (antes de su fusión con Cuatro, Telecinco) desde el 30 de marzo de 1999
Resulta un tanto curioso cómo se escribe la historia de algunas compañías del Ibex. Mediaset España, filial del gigante mediático italiano (Mediaset Spa) propiedad de Silvio Berlusconi, presumía hace unos días de valer más de 2.000 millones de euros en bolsa (concretamente, 2.074 millones). Una buena noticia en el presente, sobre todo, para sus accionistas, pero no tanto si se echa la vista atrás: la capitalización superaba los 3.700 millones en 2016 (3.754,4 millones, en concreto), según se puede ver en su ficha de la Bolsa de Madrid.
Es cierto que vale en bolsa mucho más que Atresmedia, Prisa y Vocento juntos (1.980,28 millones)
El pasado jueves, el conglomerado que dirige Paolo Vasile perdió este ‘éxito’ de valor bursátil: cerró la sesión con una capitalización de 1.959,37 millones. Pero siguió por encima de la suma de lo que valen Atresmedia (921,44 millones), Prisa (921,37 millones) y Vocento (137,47 millones) en su conjunto, cuantía que asciende a 1.980,28 millones.
Si observamos la evolución del precio de la acción, la caída es aún más notoria a simple vista. En los últimos cinco años, su máximo ha sido de 13,095 euros (registrado el 16 de julio de 2015), pero el pasado jueves cerró en 5,984 euros, es decir, un 54,3% por debajo de dicho máximo. Eso sí, los 5,984 euros están ligeramente por encima de los 5,372 euros -su precio más bajo del último lustro- registrados el pasado 27 de diciembre.
Pero el precio de la acción es un 54,3% inferior al de su máximo (13,095 euros) de los últimos cinco años
Comparaciones que vienen bien para contextualizar aún más el último movimiento de Vasile. Como saben, se aferra a su cargo a costa de la caja del grupo, tras llevar a cabo una recompra de acciones por 200 millones. Así, podrá mantener el ‘pay out’, es decir, el reparto de un dividendo equivalente al 50% del beneficio del ejercicio 2018. Y esto último es lo que más celebra la matriz, pues Mediaset SpA es dueña del 51,63% de Mediaset España, considerada su joya de la corona gracias a las jugosas ganancias que le ha reportado la telebasura en los últimos años. Además, en el caso de que quisiera lanzar una OPA (como se ha rumoreado recientemente) por el 48,37% que no controla, le costaría 947,75 millones.