EDP tiene al gigante asiático (a través de la compañía China Three Gorges) como principal accionista
La OPA de los chinos de Tres Gargantas, rácana en el precio, sobre Energías de Portugal (EDP) plantea demasiados peros para los reguladores, al margen de que el primer ministro luso, António Costa, no haya puesto ninguna pega. Ojo, porque la oferta tiene el apoyo del Gobierno chino, pero choca, sin ir más lejos con la oposición de Trump, que no lo quiere en activos americanos ni en pintura.
Conclusión: el proceso de venta se demorará, algo con lo que cuentan las energéticas europeas -suenan varias de ellas en ese run-run-, no tanto para asaltar directamente EDP (podrían plantear una contraopas mejorando el precio), como para repartirse sus activos.
Entran en juego cinco reguladores. No sólo Portugal y España, por Hidrocantábrico, también EEUU, Bruselas y Brasil
Es el punto medular, que atrae, en buena lógica a las tres grandes eléctricas españolas, Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa, a la que le ha pillado, como explicábamos ayer, el plan estratégico por medio, y no le interesa EDP. Les interesa de EDP, sobre todo, el negocio de renovables, esa joyita de filial que es EDP Renovables, que también quieren los chinos.
Dicho de otro modo: ni los chinos van a ceder -y cuentan para ello con “un apoyo extraordinario” de su gobierno, como ya se ha hecho eco Standard & Poor’s-, ni los reguladores van a pasar por el aro de cualquier modo.
Hay cinco en juego, en concreto, no sólo Estados Unidos, por la presencia internacional de EDP, o Portugal, naturalmente. Esta España también, donde EDP posee los negocios de la antigua Hidrocantábrico. También Brasil y la propia Comisión Europea.
En EEUU, la pelota estará en la Comisión para Inversiones Exteriores, el organismo gubernamental que revisa las compras que amenazan la seguridad nacional, en un momento problemático de relaciones entre Washington y Pekín.
La OPA china abre el apetito por su joyita EDP Renovables y sus activos en otros países
La Comisión Europea también prepara mecanismos similares. Ya lo dijo Juncker: “Si una estatal extranjera quiere comprar un puerto europeo, una parte de la infraestructura energética o una tecnológica de defensa, debe pasar transparencia, análisis y debate”.
En fin, es un proceso largo que lleva asociado un inevitable troceo de EDP. El sector ya tiene el ojo puesto en EDP desde hace tiempo, pero ahora lo que estudia con cartabón son sus activos, sobre todo de renovables y en zonas para crecer como Brasil o Estados Unidos. También estarán a tiempo y listas Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa.