Un día después de advertir sobre la quiebra de las pensiones, Ángel Gurría, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), ha insistido en reformar el sistema, en un acto de Nueva Economía Fórum, donde ha sido presentado por la ministra de Economía, Nadia Calviño. ¿El motivo? Se diseñó hace varias décadas, pero “ahora vivimos 15 años más”, y por eso, plantea vincular la edad de jubilación a la esperanza de vida, entre otras cosas.

Eso sí, Gurría no se ha mojado en si España debe alargar la edad de jubilación hasta los 70 años, como se ha propuesto Japón. Recuerden que actualmente está en los 65 años y seis meses, y llegará progresivamente a los 67 años en 2027. El secretario general de la OCDE también ha referido que no se han ajustado los beneficios y las contribuciones con la mayor expectativa de vida (en definitiva, quiere que se trabaje más, se pague más y se reciba menos) y ha criticado la baja tasa de reinversión de los fondos de pensiones.

Gurría considera que el Pacto de Toledo se hace indispensable porque el sistema se diseñó hace varIas décadas y ahora vivimos 15 años más 

Por todo esto, Gurría considera que el Pacto de Toledo se hace indispensable. Y, además, ha advertido que “corremos el riesgo de tener una generación de viejos pobres” en España y no podemos permitirlo, “y menos en un país europeo”.

Respecto a los Presupuestos españoles, Gurría los ve “razonables” y ha subrayado que “se hacen para ser aprobados, no para generar debates”. Asimismo, ha echado un capote al Gobierno de Pedro Sánchez, que sólo lleva unos pocos meses, y los Presupuestos son “la primera expresión organizada de sus prioridades, preferencias y directivas de política económica”. Además, ha pedido que no se centre sólo en reducir el déficit de 2019 porque hace diez años estaba en el 10,5%, a pesar de la discusión entre las previsiones de distintos organismos (1,8% para el Gobierno y la OCDE; 2,1% para la Comisión Europea y 2,4% para el FMI en el caso de que se prorroguen los Presupuestos y no se tomen medidas).

Está convencido de que el debate entre Italia y la Comisión Europea no va a poner al euro en crisis

Y, por último, destacar que Gurría también ha hablado de las cuentas presentadas por Italia. En dicho caso, considera que el debate con la Comisión Europea “necesita flexibilidad e inteligencia de las dos partes”, aunque recordando un dicho de su abuela, ha señalado que “la razón está en el mayor”. Y es que ha añadido que Italia tiene un Ejecutivo nuevo que “no está acostumbrado al tema de Europa”, por lo que hay que hacer un “trabajo de educación” que no será rápido ni sencillo, pero “no va a poner al euro en crisis”.