El mercado parece que ya ha mostrado todo su entusiasmo: la cotización de Naturgy sube un 0,45%, pero sigue por debajo del precio ofrecido por IFM (23 euros)
El culebrón que ha desatado la oferta de IFM por el 22,689% de Naturgy no ha hecho nada más que empezar y seguirá dando que hablar durante bastante tiempo. Y es que IFM no es un fondo cualquiera, sino que invierte en una empresa y quiere controlar la gestión… aunque, por ahora, diga que no quiere control y no hay concertación.
Conviene destacar que IFM Investors es un fondo australiano, aunque ahora ha lanzado su oferta a través de Global InfraCo, una filial con sede en Luxemburgo (¡qué casualidad!). Se trata de uno de los mayores gestores de infraestructuras del mundo y no es un desconocido para España (es dueño de OHL Concesiones y del 49% de Aqualia). Ahora subraya que no quiere control y que no hay concertación: o sea, que su oferta no ha sido acordada con ningún accionista, sino que se dirige a todos. Algo que resulta difícil de creer por mucho que en el primer hecho relevante remitido el martes a la CNMV se recogiera que Rioja -sociedad controlada por CVC y Corporación Financiera Alba (brazo inversor de los March)- y el fondo estadounidense GIP se han obligado a no aceptarla… y que en el segundo hecho relevante, Naturgy hablara de una “oferta voluntaria y no solicitada”, y en esto último coincidiendo con la postura de su principal accionista, Criteria Caixa.
El Gobierno ha ampliado la normativa para proteger empresas estratégicas: afectará a las inversiones extranjeras, si el importe supera los 500 millones, realizadas por otros países de la UE y de la Asociación Europea de Libre Comercio
Al decir que no quiere control y que no hay concertación, IFM podría estar buscando que el Gobierno, al que no le gusta la oferta, pudiera ceder. Recuerden que el Ejecutivo Sánchez lanzó una normativa para proteger empresas estratégicas durante la pandemia del coronavirus: en concreto, el Real Decreto-ley 8/2020, de 17 de marzo, que ha sido recientemente ampliado por el Real Decreto-ley 34/2020, aumentando la protección de empresas ante inversiones que necesitan autorización por parte del Consejo de Ministros: en la protección de sectores estratégicos (tratada en el capítulo 3), se recoge que como la situación del Covid-19 se mantiene, se establece un régimen transitorio hasta el 30 de junio de 2021 por el que la suspensión de liberalización de determinadas inversiones extranjeras directas (que se ha regulado en otros apartados) se aplicará también a las inversiones extranjeras directas sobre empresas cotizadas o no cotizadas si el importe supera los 500 millones de euros, realizadas por residentes de otros países de la Unión Europea y de la Asociación Europea de Libre Comercio (Noruega, Islandia, Suiza y Liechtenstein). Ante esta ampliación de la protección, IFM no se libraría de la autorización, pese a que ha lanzado su oferta a través de una filial con sede en Luxemburgo, pues su oferta es de 5.060 millones.
Es cierto que estamos bastante acostumbrados a que los fondos inviertan en empresas en mayor o menor medida, pero hay que distinguir tres tipos:
- Los que hacen una inversión financiera y no entran en el consejo de administración, aunque suelen presionar en lo que respecta al dividendo. Por ejemplo: BlackRock.
- Los que invierten y entran en el consejo de administración, pero no en la gestión. Por ejemplo, CVC y GIP.
- Los que hacen una inversión, pero también buscan entrar en la gestión y controlarla. Este es el caso de, entre otros, IFM.
Aclarado esto, el fondo australiano, que se ha lanzado a por Naturgy, eso sí, por etapas, ha ofrecido su oferta a todos los accionistas… Pero el día de mañana, si logra que su oferta triunfe (22,689%), y si suma el apoyo de Rioja (20,7%) y de GIP (20,6%), podría llegar a una influencia superior al 60%… y tener margen de maniobra para hacerse con el control y entrar en la gestión de la tercera eléctrica y la mayor gasista de nuestro país, pudiendo hacer cambios en la cúpula. Algo que ahora niega, por supuesto, pero todo llegará. Y ojo, conviene tener en cuenta que ahora ha empezado un proceso en el que puede haber contraofertas, pero también se necesita la autorización del Gobierno y las opiniones de la CNMV y de la CNMC (dado que afecta a un sector regulado). Además, habría que ver si la normativa para proteger empresas estratégicas se vuelve a ampliar o si acaba cuando finalice (si es que sucede algún día) el Covid-19.
Eso sí, el mercado parece que ya ha mostrado todo su entusiasmo: este miércoles, la cotización de Naturgy sube un 0,45%, situándose en 22,41 euros (es decir, por debajo del precio de la oferta de IFM -23 euros por título-).