Marín Quemada (CNMC) ha suavizado sus reformas de la luz y el gas, pero aún no ha dicho la última palabra
El pulso entre la CNMC y las gasistas se mantiene, pero, eso sí, ahora en un tono más suave. El regulador ha rebajado el recorte de la retribución de la distribución del gas al 9,6%, en lugar del 17,8% que planteó en un principio el pasado julio, generando un fuerte conflicto y quejas de las empresas porque ponía en peligro inversiones y la credibilidad de España.
Por tanto, José María Marín Quemada, presidente de la CNMC (su mandato ha vencido, pero debe seguir hasta que haya nuevo Gobierno que elija un sucesor), también ha cedido, como se preveía, en el recorte de dicha retribución, como ya ha hecho con las respectivas a las actividades del transporte y la distribución de electricidad, y las de transporte de gas y regasificación. Eso sí, aún no ha dicho la última palabra, porque tras recibir alegaciones y revisar las circulares, estas se han remitido al Consejo de Estado, que debe emitir un informe que no es vinculante, y después, el regulador es el que las tiene que aprobar.
Como se preveía, Marín Quemada suaviza también el recorte a la distribución del gas (del 17,8% al 9,6%)... y parece que ya no tiene tanta prisa en aprobarlo
En el caso de la circular de la distribución del gas -la que más polémica despertó-, ahora la CNMC la somete a audiencia pública durante un plazo de 15 días hábiles, en el que se podrán presentar alegaciones. Es cierto que se ha rebajado el recorte casi a la mitad de lo que se planteó en un principio, lo que supone un descenso de la retribución media anual de unos 1.420 millones de euros a unos 1.283 millones con la nueva propuesta durante el periodo 2021-2026, que corrige la ‘mala praxis’ de la anterior. Un recorte que afecta a las compañías que se dedican a la distribución de gas: Naturgy (representa el 70% del mercado) y pequeñas compañías, como Nortegas, Madrileña Red de Gas, Redexis y Gas de Extremadura.
Además de suavizar el ‘tijeretazo’, parece que la CNMC ya no tiene tanta prisa. Las circulares relativas a la electricidad sí deben estar listas antes del 31 de diciembre porque entran en vigor en enero de 2020, pero en el caso de las del gas, hay tiempo: no entran en vigor hasta enero de 2021.