Hoy lunes los accionista de Acerinox, entre los que están Corporación Financiera Alba, vehículo inversor de la familia mallorquina March, con un 19%, el empresario Daniel Bravo, quien mantiene su 5%; Industrial Development Corporation (IDC), que depende del fondo soberano de Sudáfrica, conserva su 3%, y el fondo estadounidense Millennium Group Management (1,965%), se daban cita en su Junta General de Accionistas.

José Antonio Gómez Valencia, portavoz del comité de huelga de Acerinox, tomaba la palabra: "No pueden dejar de lado a esos trabajadores que luchan para sacar adelante esa fábrica. Se nos ha pedido un esfuerzo en épocas pasadas como fue la pandemia y lo hicimos y ahora queremos negociar", reivindicaba el representante de los trabajadores que llevan 78 días en huelga en la planta del Campo de Gibraltar, Palmones (Los Barrios, Cádiz). Recordemos que la planta está parada desde el 5 de febrero por una huelga indefinida. El motivo: la oposición a los ERTE anunciados por la compañía, además de la exigencia de un aumento salarial. 

El consejero delegado de Acerinox Europa, Bernardo Velázquez, les aseguraba que "no nos vamos a olvidar de vosotros en absoluto". "Por supuesto que no nos olvidamos de esa fábrica, a la que destinamos todos los años del orden de 50 millones de euros para evitar la obsolescencia".

Velázquez ha recordado que fue en esa factoría gaditana "donde se originó todo" y donde él mismo pasó "mucho tiempo allí en los años noventa", lo que le hace tener "una ligazón sentimental con la fábrica". Aunque continuaba, manifestando que llevan "invirtiendo todos los años del orden de 40 o 50 millones de euros para evitar la obsolescencia y hacer un buen mantenimiento de la fábrica" y "en estos momentos, con ejercicios de pérdida, hace falta un ejercicio de responsabilidad y sacar adelante a la fábrica entre todos. Ya nos gustaría repartir los beneficios, pero hay que trabajar todos para tenerlo". Pero ha expresado su confianza en que "nos pondremos de acuerdo en breve en todo lo necesario para el bien de nuestra compañía".

En la misma línea, el presidente no ejecutivo de Acerinox, Carlos Ortega Arias- Paz: "Olvidarnos de ustedes en absoluto. Está en nuestros primeros puntos de los consejos de administración". 

Pero en la misma Junta han destacado la compra de Haynes, que "realmente representa la mejor empresa para nosotros, la más complementaria y la que mejor encaja con nuestra estrategia". Teniendo en cuenta que Estados Unidos se presenta como el futuro para la compañía, su deseo de centrar en aceros especiales y las pérdidas que acumula la planta de Cádiz, que llevan a Velázquez a tener órdenes de sanear la fábrica, no parece que Acerinox vaya a poder cumplir su promesa en España. 

Relacionado

Por otro lado, un accionista ha preguntado por una OPA de posibles competidores o una que pueda venir de una compañía con mucha capitalización. Ante tal escenario, Acerinox lo tiene claro, si sus accionistas deciden que no genera valor, no acudirán y no tendría éxito, y ha insistido en que la compañía tiene mucho más futuro por sí sola ndependientemente.