Air Europa se queda en una posición delicada, tras el rechazo de IAG a comprarla... y mientras Air France-KLM y Lufthansa están en pérdidas / Foto: Pablo Moreno
Air Europa se encuentra en una posición delicada para encontrar nuevos novios, tras el ‘no’ a la compra que ha recibido por parte de IAG. Eso sí, conviene destacar que este último holding aéreo ha logrado beneficio semestral (en concreto, de 905 millones de euros), frente a las pérdidas del franco-neerlandés Air France-KLM (-400 millones) y del alemán Lufthansa (-265 millones).
La aerolínea del grupo Globalia y, por ende, de la familia Hidalgo (encabezada por el patriarca, Juan José Hidalgo, más conocido como ‘Pepe Aviones’) ha presumido de “solidez y viabilidad”, pero lo cierto es que no es nada agradable verse en medio de un escándalo político. Todo ello por el hecho de que Javier Hidalgo patrocinara a Begoña Gómez y de que, curiosamente, la aerolínea fuera rescatada por el marido de esta y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con dinero público a través de créditos avalados por el ICO y de préstamos de la SEPI procedentes de fondos europeos.
Parecía que el visto bueno de la Comisión Europea a la fusión de Lufthansa e ITA Airways (antigua Alitalia) iba a allanar la compra de Air Europa por parte de Iberia (aerolínea perteneciente a IAG), pero al final no ha sido así. A pesar de que Luis Gallego, consejero delegado de IAG, es cercano al socialismo, se ha escudado en el regulador europeo (que exigía ceder muchas más rutas de las propuestas) para renunciar a comprar Air Europa. Asimismo, desde IAG se considera que se trata de “la mejor decisión para proteger los intereses de los accionistas”, entre los que destaca la aerolínea catarí Qatar Airways (dueña del 25,143% del capital), y además, se ha anunciado que volverá a repartir dividendo el próximo septiembre.
No hay que olvidar que la compra de Air Europa por parte de Iberia (IAG) se empezó a fraguar en noviembre de 2019 de la mano de Javier Hidalgo y Luis Gallego (entonces sólo CEO de Iberia) a cambio de 1.000 millones de euros, un precio que se consideró demasiado elevado con el batacazo del Covid que llegó en 2020 y tras el ascenso de Gallego a consejero delegado de IAG, el pacto inicial se modificó el 20 de enero de 2021, bajando el precio a 500 millones. Este precio aún se veía como elevado a principios de 2022 y llevó a suspender las negociaciones, convirtiendo el ‘caso Iberia-Air Europa’ en el arquetipo del desastre de las subvenciones públicas a empresas y en el ridículo de la ‘Smart people’. Más tarde, volvieron las negociaciones, ahora ya lideradas por ‘Pepe Aviones’ y su propio estilo: logró que el dueño de Iberia le ofreciera más dinero y después lanzó un ERTE para 4.000 empleados en Air Europa. Al final, IAG ha rechazado hacerse con el 100% de la aerolínea de la familia Hidalgo… poniendo como excusa al regulador europeo y de momento, conservará el 20% del capital. En todo este culebrón de negociaciones, ahora frustrado por el escándalo político, conviene referir que ‘Pepe Aviones’ llegó a negociar con Air France-KLM en 2022 sobre una posible adquisición, mientras Lufthansa se decantaba por ITA Airways.
Sin embargo, ahora ni el grupo aéreo franco-neerlandés ni el alemán parecen estar en la mejor de las situaciones para plantearse la compra de Air Europa. En el caso de Air France-KLM, las pérdidas en el primer semestre han ascendido a 400 millones, frente a los 260 millones ganados hace un año; su resultado bruto de explotación (ebitda) ha bajado un 16,7%, a 1.345 millones; y la deuda neta ha ascendido a 6.192 millones. Malas cifras a pesar de que que los ingresos han crecido un 4,65%, a 14.603 millones, gracias a transportar 46,61 millones de pasajeros (+5,2%).
Air France-KLM pierde 400 millones hasta junio por el encarecimiento del combustible y la presión de costes, mientras Lufthansa pierde 265 millones no sólo por los mayores costes, sino también por el impacto de las huelgas y de los retrasos en entregas de aviones
“El segundo trimestre confirmó un entorno cada vez más desafiante para la aviación, con el aumento de los precios del combustible y una continua presión sobre los costes”, ha explicado el CEO de Air France-KLM, Benjamin Smith. Y es que a pesar de “resultados estables” en KLM y Transavia, “Air France se vio afectada por acontecimientos excepcionales, entre ellos el efecto negativo de los Juegos Olímpicos de junio” y han tomado medidas para adaptarse, como congelar la contratación y recortes adicionales de costes, aunque el grupo mantendrá las “grandes inversiones” para renovar la flota… al considerarlo una “palanca estratégica” para mejorar los resultados.
Por su parte, el grupo Lufthansa también ha dado un giro de 180 grados en el primer semestre, pues ha pasado de ganar 414 millones a perder 265 millones, tras múltiples huelgas y retrasos en entregas de aviones; su resultado operativo ajustado ha sido negativo (-163 millones) y el margen operativo ajustado se ha desplomado del 4,9% al -0,9%, por el aumento de los costes. Todo ello, a pesar de que el grupo -dueño de Lufthansa, Austrian Airlines, Eurowings, Brussels Airlines, Swiss, Air Dololomiti, Edelweiss Air, Discover Airlines y Lufthansa Cargo- que lidera Carsten Spohr ha tenido unos ingresos de 14.332 millones (+6%) y ha transportado 60,29 millones de pasajeros (+10%).